Lo primero, desangrarlo en la ducha/bañera. Siguiente paso, trocear. Primero manos y dientes. Destruir y machacar al máximo, y deshacerse de ello en el mar, o hacer un trayecto en coche e ir tirando trocitos a la cuneta. Trocear el resto y congelar. Ir deshaciéndose de los cachos sin rutinas ni repetir sitio