Si tienes dudas entre el eléctrico o el de gas, es que está como yo, en la ruina, a punto de estarlo o, lo que peor, no lo estás, pero no vives por no estarlo. En tal caso te diré, por propia experiencia, que te da igual de gas o eléctrico; la compañía con la que contrates te cobrará lo que quiera y lo que crea que eres. Cuando pidas explicaciones de la tarifa te dirán que es por el gas, si estás en eléctrico, o que es por el eléctrico, si estás en el gas. Si preguntas más, te dirán que es por la amortización de las derivadas del impacto energético, o cosas así. Si preguntas todavía más, te dirán que ya mandarán a un inspector para ver si no estás por encima de la potencia contratada, más o menos.
En definitiva, y lo digo en serio, da igual. Te van a cobrar lo que les salga (lo digo en serio y de verdad). Es absurdo romperte la cabeza por las tarifas de nada, por mucho que diga la televisión.
Haz que parezca que sabes, que tienes un consumo continuo y habitual y que lo harás por mucho tiempo (como una empresa con visos de sobrevivir) y te cobrarán sin demasiada maldad. No vives en un mundo justo, vives en un sitio en el que sobrevivir para poder padecerlo... Encima, no es por causas naturales o dioses malvados, es por gente como tú que no está en tu situación y que le importa una verdadera cosa lo que te pueda parecer o lo que puedas padecer, pero, aún así lo votas. Por tanto, seguirá haciendo lo que sea para que sigas padeciendo lo mismo que hasta ahora, cuando menos, si quiere conservar sus privilegios o su puesto.