No, si el bulbo del tulipán también se consideraba valioso, no se podía falsificar, era fácilmente tras*portable y escaso (se supone que en los años malos no habría tulipanes) y tal y cual don Pascual.
Total que si mañana sale un cerebrito con el algoritmo de marras y se pone a hacer bitcoines desde su PC, aún más indetectables que los de los bloques y los nodos, se acaba el bitcoin de un día para otro.
El oro también si podemos hacerlo sintético, pero hasta que no, lo poco que se extrae de las minas mantiene su escasez,
quiero decir su valor.
Y es que desde que a un tío se le ocurrió atar una piedra de silex a un palo, la economía dejó de ser un juego de suma cero. Luego el dinero se ha de crear de la nada que quieras que no.
De las ideas de la gente digo.
Si no hay ideas nuevas ni nada nuevo, la economía, supongo yo, es un juego de suma cero.
Ya nos dirá el otro usuario qué camello acepta bitcoines porque los perros no sólo detectan droja, sino que también los entrenan para oler dinero. A lo que huelen los dracmas bolivarianos no sé, mesié,
pero ya se lo puede imaginar.
Quiero decir que a quien hay que poner a cargo de la fotocopiadora es al manco. Y si no, pues cortarle las manos, claro. A ver, ¿algún voluntario?.
________
FREE ZOUHAM o abandonad toda esperanza.
Total que si mañana sale un cerebrito con el algoritmo de marras y se pone a hacer bitcoines desde su PC, aún más indetectables que los de los bloques y los nodos, se acaba el bitcoin de un día para otro.
El oro también si podemos hacerlo sintético, pero hasta que no, lo poco que se extrae de las minas mantiene su escasez,
quiero decir su valor.
Y es que desde que a un tío se le ocurrió atar una piedra de silex a un palo, la economía dejó de ser un juego de suma cero. Luego el dinero se ha de crear de la nada que quieras que no.
De las ideas de la gente digo.
Si no hay ideas nuevas ni nada nuevo, la economía, supongo yo, es un juego de suma cero.
Ya nos dirá el otro usuario qué camello acepta bitcoines porque los perros no sólo detectan droja, sino que también los entrenan para oler dinero. A lo que huelen los dracmas bolivarianos no sé, mesié,
pero ya se lo puede imaginar.
Quiero decir que a quien hay que poner a cargo de la fotocopiadora es al manco. Y si no, pues cortarle las manos, claro. A ver, ¿algún voluntario?.
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FREE ZOUHAM o abandonad toda esperanza.
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