Es encomiable.
Pero claro, si se mirase un poco por los supuestamente escasos recursos públicos, habría que tener en cuenta si ése gasto universitario público es una inversión de recursos del país para un posterior retorno en forma de conocimiento y trabajo volcado en la economía del país, o no.
Claro que viendo cómo se tira el dinero que no es de nadie en redes clientelares y cosas, pues que este buen hombre haya podido con esfuerzo cumplir una meta personal en su vida me parece el menor de los derroches de los caudales públicos.
Enhorabuena para él.