Estando totalmente de acuerdo contigo, yo aplico el principio de caridad interpretativa, y creo que ampara que la ciencia les puede ayudar, pero no me parece entender que se refiera a los niños ni a los menores de edad. En general, me parece muy sensato, y decir las verdades del barquero en público no le va a a ofrecer ninguna ventaja. Para hacer esa bestialidad a menores, tendría que tener un diagnóstico claro, concluyente, proporcionado por varios profesionales, de que su vida corre serio peligro, de que estamos evitando un suicidio seguro, aunque seguro no hay nada. No me gustaría dedicarme a la psiquiatría, y ahora menos que nunca.