<table width="533" border="0" cellpadding="0" cellspacing="0"><tbody><tr><td class="mainnewstitle" valign="middle">
Satélite ruso detecta indicios de nuevo ciclo solar
</td> </tr> <tr> <td height="10"> <table width="100%" border="0" cellpadding="0" cellspacing="0"> <tbody><tr> <td> <table border="0" cellpadding="0" cellspacing="0"> <tbody><tr> <td class="maintime">10:51</td> <td class="maindatedelim" width="1">|</td> <td class="maindate">
02/
04/ 2009</td> </tr> </tbody></table> </td> <td align="right">
</td> </tr> </tbody></table> </td> </tr> </tbody></table> Moscú, 2 de abril, RIA Novosti. Telescopios ultravioleta a bordo del satélite ruso Coronas-Photon detectaron indicios de un nuevo ciclo de actividad solar, según se desprende de una nota publicada en la página web del proyecto Tesis.
"Son zonas bastante apartadas del ecuador (...) y es allí, en altas latitudes heliocéntricas, donde emergerán a la superficie los fuertes campos magnéticos de un nuevo ciclo, los cuales se han ido formando durante varios años en las profundidades del Sol", consta en el comunicado. "Este cinturón tardará ahora algunos años en bajar al ecuador y va a incrementar su actividad, formando lo que conocemos como ciclo solar".
Actualmente estamos en la fase de actividad solar mínima que empezó hace dos años. "Prácticamente no se ven manchas solares desde diciembre de 2006 (...) Es un récord", constató Vladímir Kuznetsov, director del Instituto ruso de magnetismo terrestre, ionosfera y difusión de ondas de radio (Izmiran).
El pasado año, las manchas solares fueron visibles sólo durante cien días; y en los primeros tres meses de 2009, durante 12 días, según los datos de la NASA.
La baja actividad solar hace a los científicos hablar de la posible reedición del Mínimo de Mounder, período de 1645-1715 se conoce en la historia de Europa como "pequeña Edad de Hielo".
"Estamos entre un ciclo que ha terminado y otro que acaba de empezar pero no podemos decir en qué fase, porque no hay manchas", dijo Kuznetsov.
El satélite ruso Coronas-Photon se encuentra en la órbita circunterrestre desde el pasado 30 de enero. Es el tercero de una serie de aparatos desarrollados para observar la actividad solar. El telescopio Tesis a bordo de este satélite va a proporcionar casi un millón de nuevas imágenes del Sol.