Un agente de la Guardia Civil, en la prisión para abrirle la cabeza a su mujer en Valencia: quería divorciarse

Si se quería divorciar no hacía falta abrirle la cabeza, con decírselo a su mujer bastaba. A no ser que la tipa insistiera en no querer divorciarse.
 
A saber a cuantos inocentes habrá enchironado este sujeto con la VIOGEN, porque hay que cumplir la ley.

Ahora, tener que probar la medicina legal progre en carne propia, no es nada agradable, y lo sabía, por eso quizás actuó así doh!doh!
 
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