Tatuajes, piercings y demás

No llevo ninguno, después de la mili estuve mucho tiempo pensando en hacerme alguno pero no vi nada que me motivara y al final pase.

Ultimamente me estoy planteando hacerme algo en un brazo, para tapar la marca de una quemadura bastante antiestética, pero ya veremos... Por una parte me da cosa ver la marca pero por otro lado no me motiva hacerme el tatuaje solo por eso, me imagino que al final acabare pasando.
 
Yo es que siempre he pensado que un tatuaje debía ser expresión de algún tipo de determinación o algo importante. De alguna forma que la cicatriz exterior fuese la manifestación de una cicatriz interior.
 
Yo es que siempre he pensado que un tatuaje debía ser expresión de algún tipo de determinación o algo importante. De alguna forma que la cicatriz exterior fuese la manifestación de una cicatriz interior.

Demasiadas vueltas.
Es más sencillo: me emborracho y me hago un tatuaje.
 
Por no contar la cantidad de personas que hay con la actitud de "Y yo mas, y yo mas"....
 
Por no contar la cantidad de personas que hay con la actitud de "Y yo mas, y yo mas"....

:XX:

No tiene nada que ver, pero me he echado una carcajada porque este mediodía alguien ha tenido que decirle a mi suegra que la embarazada soy yo (Estaba tan en ese plan que le ha faltado decir que tenía más contracciones que yo)
 
Pues ya verás cuando tengas al bebé.
:D

Por cierto, que he notado que todos los que han tenido hijos o nietos, o los quieren tener, se quedan hipnotizados con los bebés con una sonrisa en la cara. Lo curioso es que yo no creo que miren al mío, sino que ven a los suyos a través del mío...

No lo dicen, pero se les nota :)
Me gusta ver el cariño que demuestran hacia su familia con esas miradas ^^
Muchos burbujos de la guarde y del ático tendrían que pararse a mirar las caras de esa gente, y luego las suyas en un espejo que yo imagino enfurruñadas o preocupadas gran parte del tiempo, y preguntarse qué esperan obtener de la vida cuando al final se acabe.
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Cuando emprendas tu viaje hacia Ítaca
debes rogar que el viaje sea largo,
lleno de peripecias, lleno de experiencias.
No has de temer ni a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni la cólera del airado Posidón.
Nunca tales monstruos hallarás en tu ruta
si tu pensamiento es elevado, si una exquisita
emoción penetra en tu alma y en tu cuerpo.
Los lestrigones y los cíclopes
y el feroz Posidón no podrán encontrarte
si tú no los llevas ya dentro, en tu alma,
si tu alma no los conjura ante ti.

Debes rogar que el viaje sea largo,
que sean muchos los días de verano;
que te vean arribar con gozo, alegremente,
a puertos que tú antes ignorabas.
Que puedas detenerte en los mercados de Fenicia,
y comprar unas bellas mercancías:
madreperlas, coral, ébano, y ámbar,
y perfumes placenteros de mil clases.
Acude a muchas ciudades del Egipto
para aprender, y aprender de quienes saben.

Conserva siempre en tu alma la idea de Ítaca:
llegar allí, he aquí tu destino.
Mas no hagas con prisas tu camino;
mejor será que dure muchos años,
y que llegues, ya viejo, a la pequeña isla,
rico de cuanto habrás ganado en el camino.

No has de esperar que Ítaca te enriquezca:
Ítaca te ha concedido ya un hermoso viaje.
Sin ellas, jamás habrías partido;
mas no tiene otra cosa que ofrecerte.

Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado.
Y siendo ya tan viejo, con tanta experiencia,
sin duda sabrás ya qué significan las Ítacas.
 
A mi de ese hombre me gustaba mucho este

Dijiste: "Iré a otra ciudad, iré a otro mar.
Otra ciudad ha de hallarse mejor que ésta.
Todo esfuerzo mío es una condena escrita;
y está mi corazón - como un cadáver - sepultado.
Mi espíritu hasta cuándo permanecerá en este marasmo.
Donde mis ojos vuelva, donde quiera que mire
oscuras ruinas de mi vida veo aquí,
donde tantos años pasé y destruí y perdí".
Nuevas tierras no hallarás, no hallarás otros mares.
La ciudad te seguirá. Vagarás
por las mismas calles. Y en los mismos barrios te harás viejo
y en estas mismas casas encanecerás.
Siempre llegarás a esta ciudad. Para otro lugar -no esperes-
no hay barco para ti, no hay camino.
Así como tu vida la arruinaste aquí
en este rincón pequeño, en toda tierra la destruiste.

Creo que lo leí en alguno de los libros del cuarteto de Alejandría, pero, a saber. EN todo caso, tuve una temporada de obsesionarme un poco con él.
 
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