Yo voy a romper mi abstencionismo crónico y no porque me guste Vox, a los que regalaré el voto con sereno excepticismo rayante lo despectivo, sino porque estaba en peligro de caer en el soberbio y vano puritanismo abstencionista trevijanero. Lo de España es claro no se puede solucionar en urnas pero solo insinuar que el abstencionismo sirve para algo es insultar las inteligencias.
Asínque, decidido a enfangarme por sacudirme de encima semejantes tentaciones puritamas la cosa es elegir la opción menos loca y a su vez pueda desatar ataques verbales y amenazas desde Europa. Solo sentirse ofendidos podría despertar cierto enervamiento popular hacia injurias directas europeas.