Es curioso ver como, a veces, parece que Dios nos habla particularmente en un momento dado de nuestra vida a través de las Escrituras.
En esta pequeña comunidad que se está formando, donde se ha comenzado la magnífica iniciativa del rezo del Santo Rosario, y precisamente toca este Evangelio donde nos invita a estar preparados. Que mejor manera que consagrarnos al Inmaculado corazón!!!
Un abrazo.
Pues tenemos que ver cuáles son las fechas más próximas entre las que se proponen, con objeto de preparar la consagración
Una vez lo hice por mi cuenta. Sencillamente con el librito de San J. María Grignon.
Después dos más con el Padre Lofeudo. Es en realidad el mismo. Salvo que para las meditaciones posteriores a las oraciones, en cada una de las 4 semanas se dedican a uno de 4 Santos extraordinariamente marianos:
San Luis Maria Grignon, San Maximiliano Kolbe, Santa Teresa de Calcuta, y San Juan Pablo Ii