Por rentabilizar el esfuerzo, copio y pego comentario mío de otro hilo abierto:
Abascal no hizo de joven la mili y con el tiempo, dado el arraigo regionalista y el desarraigo de los jóvenes a causa de un profundo desconocimiento de la realidad del resto de regiones, formula la posibilidad de que la mili "es buena". Han pasado años y no se ve ese evento del mismo modo que cuando tienes veinteypocos, con los estudios a cuestas que cuando eres adulto y filosofas sobre las bondades o desaciertos de la mili pensando en la vertebración de España a partir del conocimiento directo de la juventud del resto de juventudes a lo largo y ancho de la geografía española.
Dicho de otro modo. No ha llegado al Parlamento por prometer que nadie haría la mili, y al contrario, sí ha hablado de hacerla. El resto va por cuenta de sus votantes jóvenes si es que están de acuerdo. ¿Alguna contradicción acaso?. ¿Alguna traición a la palabra dada "una vez" se ve inmerso en la lucha política?. No. ¿Rechazaría el consejo de su médico fumador de dejar de fumar?. Pues eso.
Por contra, tenemos a otro que "sí" llegó al parlamento y a la vicepresidencia de gobierno prometiendo castigar a la "casta". Oiga, no ha pasado apenas tiempo y ahí le tenemos con casoplón en lugar pijo de la sierra madrileña, tres churumbeles -a los que deseo sinceramente la mejor crianza y futuro-, "compañera" familiar en labores de ministra etc... Es decir "casta por partida doble". Si pensaron que al "sistema" hay que demolerlo desde dentro, queda claro que esa familia está dentro... muy dentro. Y como quiera que vivir a cierto ritmo implica acostumbrase a las mieles del éxito (gracias a todos y todas los que y las que creyeron en su compromiso con la gente), habría que pensar que tienen un plan "B" que en cuanto tenga la oportunidad implicará abandonar esa residencia castuzil para volver a Vallecas entre su gente, o al Palacio de la Moncloa si no queda más remedio. Uno se sacrifica por el "pueblo" lo que haga falta...
¿Se trata de dos casos iguales?. Pues no. Uno llega al poder diciendo que es "gente" que luchará contra la casta y acaba siendo casta por partida doble, mientra el "otro" no hizo la mili y con el pasar del tiempo comprende sus bondades.
No hacer la mili no le convierte a uno en antipatriota, y menos tal como está el patio. Otro promete destrozar a la casta y cuando llega el poder se convierte en casta familiar. No él o ella, no. Los dos. Con dos cohones.