Ser profesor hoy en día es una fruta cosa. Es de las profesiones más duras y menos valoradas.
Sin autoridad, tienes que aguantar que todo el mundo te diga cómo tienes que hacer tu trabajo, insensateces que te mandan hacer y a los padres poniéndote a parir en los grupos de WhatsApp. Ahora además hay que estar pendiente de los deberes, que van por una plataforma. Por no hablar de que gracias a la integración tienes que estar pendiente de un alumno con parálisis cerebral, otros zumbados "hiperactivos", otro que no sabe español porque acaba de llegar del extranjero, los que pasan de estudiar y te revientan las clases...
Los padres no aguantan a sus hijos pero creen que aguantar a 25 o 30 es la mar de fácil.
Os invito a haceros profes a todos los decís que es un chollo porque tienen muchas vacaciones.