Religión y violencia: El mito de la violencia religiosa

noticiesiprofecies

Madmaxista
Desde
21 Sep 2015
Mensajes
20.352
Reputación
49.022
1701553498395.png

Lo que sigue no lo he escrito yo. Es de un blog de un fraile capuchino, Cinto Duran. Originalmente en catalán, yo lo traduzco (igual editaré la traducción, pues la repasaré por si hay alguna imprecisión).

Religión y violencia: El mito de la violencia religiosa

Estoy leyendo un libro bastante grueso de William T. Cavanaugh escrito hace poco. Casi a la mitad del libro, formula una pregunta: «Si ahora hiciésemos una encuesta a los norteamericanos que se confiesan cristianos, y les preguntásemos: Usted ¿estaría dispuesto a apiolar por su fe? ¿Qué responderían ustedes, nosotros?… Seguramente que no. Y si le preguntaseis: ¿Usted estaría dispuesto a apiolar por su país? ¿Qué responderían?… ¿Verdad que se intuyen las respuestas? Y no simplemente en los EE. UU., esto nos lo podrían preguntar a nosotros, a cada uno. Tú, que eres de tal país, ¿matarías por tu fe? Habría muy pocos. ¿Matarías por tu país? Aquí sí que nos encontraríamos, y muchos.» Y este autor del libro se pregunta: «¿Y por qué, dicen pues, que la religión es la causa más grande de la violencia?» Las fronteras, las banderas, los himnos… traen muchas peleas. Piénsenlo por un momento ustedes mismos. En nuestras conversaciones diarias normales, ¿por qué se pelean, por la fe, o por los problemas de la nación y la política? ¿Qué trae más violencia en nuestras vides? ¿Por qué se continúa diciendo, pues, que la religión es la fuente más grande de violencia? Ya no digamos cuando la fuente de violencia es la búsqueda de dinero, o el sesso, esto lo tenemos cada día en los periódicos. ¿Por qué, pues, se continúa diciendo que la religión es la mayor fuente de violencia?

Este autor titula su libro de esta manera: «El mito de la violencia religiosa», El autor no quiere decir que la religión y nuestra fe no hayan traído violencia, y esté trayendo ahora; está clarísimo, ha sido y es así, pero: ¿Es la fuente mayor de violencia? Ahí está el problema. Esa manía de poner el acento en la religión como fuente de violencia, ¿no tapa otras violencias mucho más graves y mucho más actuales? Ahí está el problema que el autor quiere desenmascarar.

En el libro de este señor dice que el mito de que la religión es la fuente más importante de violencia es un mito que fundamenta un pensamiento que es tenido por evidente: «El pensamiento laico, laicista, el pensamiento agnóstico, incluso ateo, es más tolerante y facilita que se arreglen los problemas». Este es el pensamiento que tenemos puesto en la cabeza, pero ¿es así?

Esto es lo que intenta desmontar el autor de este libro. Primero desmonta las llamadas guerras de religión de los siglos XVI-XVII, y punto por punto (aquí no puedo entretenerme) va desmontando y hace ver que la causa que hay en aquellas guerras, llamadas de religión, no tienen relación con la religión en el 99 % de los casos. Y también hay que preguntarse ¿el laicismo ha traído la paz? Esta es la pregunta. Se empezó con la revolución francesa que comenzó cortando cabezas, y duró todo el siglo XIX. Y otro movimiento laicista: los nazis, muy laicos, muy laicos, una «maravilla absoluta de paz, tranquilidad y tras*parencia»; y no digamos del marxismo. La Segunda Guerra Mundial fue por los nazis, y anteriormente ya había habido las revoluciones marxistas que llenaron y han llenado todo el mundo «lógicamente con una paz a golpe de bota». ¿Ha traído la paz el laicismo? Este laicismo que vivimos actualmente fruto del libre mercado que está destrozando a las personas humanas ¿es portador de paz? Vale la pena que al menos los creyentes lo tengamos claro, que la fe no es la principal fuente de problemas, no es la fe, y menos cuando hacemos referencia al Nuevo Testamente y los Evangelios. Esta actitud agresiva es constante en la historia de la humanidad, pero últimamente es absolutamente desencarnada y visible.

Fíjense hoy en el texto de Isaías: Dedico mi canto a mi amado, ¿canto del enamorado de su viña? ¿Quién es el enamorado? Dios. ¿Quién es su viña? El pueblo de Israel. Y hace esta poesía, en la que se ve a Dios arreglando la viña, alimentándola, limpiándola, haciendo el lagar, vigilándola, trabajando para esta viña que es Israel, que es la humanidad… ¿Y de qué manera responde el pueblo de Israel, la humanidad? Pues de la manera que estamos viendo ahora, igual que en el Evangelio. ¿Qué hacen los jefes de esta viña? Quieren quitar a Dios, a sus enviados de la viña. La viña no tiene amo, los amos somos nosotros, la referencia somos nosotros, únicamente nosotros, solo el hombre. El hombre se hace amo de la viña, pero ¿qué pasa en el mundo actual? Un amo total de todo, que puede destrozarlo todo, pero que ha vaciado el mundo de Dios y, por lo tanto, de consuelo, de esperanza y de sentido. El mundo ha quedado vacío, y el corazón del hombre es un desierto; porque sin Dios el hombre no se entiende, sin Dios el hombre pierde la auténtica alegría.

Por eso yo diría, como decían los jesuitas antiguos y aún actualmente: Todo se tiene que hacer a mayor gloria de Dios. ¿Qué quiere decir esto? No que Dios necesite la gloria, sino que somos nosotros quienes necesitamos la gloria de Dios. ¿Qué quiero decir? Es importante volvernos a Dios y a la fe su buen nombre, porque en la medida que vemos que la fe no es fuente de violencia, ni de destrucción, sino de Vida y Esperanza, esto hará que la persona humana pueda abrir una ventana y pueda respirar a fondo.

Por eso es importante que nosotros los cristianos seamos portadores de este mensaje de esperanza, que Jesucristo es, ha resucitado, y que la paz que esto comporta nos llena el corazón de serenidad, de ilusión y de sentido. Por eso decía San Pablo en el texto de la carta a los filipenses que hoy hemos leído: Que nada os inquiete. Es esto lo que debería hacer el creyente. En cada ocasión acudid a la plegaria y a la súplica, y presentad a Dios vuestras peticiones con acción de gracias. Así la paz de Dios, que sobrepasa todo lo que podamos comprender, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Jesucristo. Nosotros debemos ser la Buena Nueva de nuestros compañeros, amigos y familiares, nosotros personalmente: hombres, mujeres, que hemos gustado la paz de sentirnos llenos de Dios y somos por lo tanto, instrumentos no de violencia sino de paz y concordia. Así limpiaremos la faz de Dios, limpiaremos el nombre de Dios, y así Dios volverá a ser una Palabra que trae esperanza y no miedo.

DOMINGO XXVII DE DURANTE EL AÑO, 2 de octubre de 2011
(Is 5,1-7; Fl 4,6-9; Mt 21,33-43)
1701553190493.png
 
Última edición:
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Última edición:
Volver