A este gandul borjamari lo que le pasa es que el anterior destino al que tenía pensado ir, Noruega, le da reparo porque le iba a tocar un trabajo con horario de ocho de la mañana a cinco de la tarde, y claro, se le iban a acabar las siestas y permanecer despierto dando por saco en el foro hasta las tres de la madrugada. Ahora está tanteando irse al paraíso neoliberal del otro lado del charco a trabajar para un empresario de mentalidad trumpista.
Por cierto, me sangran los ojos cada vez que le da por escribir aberraciones como "Jiuston", "Gusa", "Janofa", "Lilla" y "Moscau".