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Himbersor
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Resulta que viviendo en mi cueva, pues en mi provincia no han llegado apenas estas empresas, no tenía referencias de las operadoras de bajo coste en trenes de alta velocidad, más allá de sus nombres:
La francesa Ouigo
La itlaiana Iryo
La de RENFE llamada Avlo
Hace tiempo había leído un artículo al respecto, y parecía que eran un poco como RaynAir y compañía.
Dejas a un lado ciertas comodidades, medidas de equipajes,... en post de usar sus horarios/rutas y menor coste.
Pensé... estupendo, algo de competencia viene bien y conseguimos más horarios a elegir.
Pues ya me ha tocado, sin querer, pues no sabía que había comprado un AVLO de RENFE.
Cuando leí las siglas imaginé que era como decir un Avant, un ... el nombre del modelo del coche.
Es la única lowcost en mi provincia, hasta que operen el resto a finales de 2026. He buscado algo de info y mis pareceres no son errados, demasaida gente con la mismas experiencias, que cuento para que no le pase a gente el comprarlo sin saber a lo que va.
Porque las lowcost están genial si sabes a lo que vas y el coste es notablemente bajo.
El ruido abordo durante las más de 3h que duró mi viaje, era bastante por enciama de lo que uno está acostumbrado para un tren. Era como si tuviese el coche una ventanilla abierta.
La climatización era buena, eso sí. Tenia usb y enchufe estándar.
En lugar de 2 y 2 filas de asientos, eran 3 y 2 en todos los coches.
Esa plaza no sale de la nada. Se notaba mucho la falta de espacio a lo ancho. A lo largo lo vi aceptable. Pero la gente que estaba enfrentada, que eran muchas las mesas, se les veía realmente incómodos.
Las pantallas de información, todo muy nuevo, estaban mal!!. Marcaban temperaturas del exterior y velocidades de viaje disparatadas.
Y esto me hace preguntarme, porque no se arregla, qué más fallos habrá que no vea, si esto tan simple y vistoso no parece preocupar en solucionar no quiero ni pensar lo que habrá por atrás.
Molestias en los oídos, y nunca me pasa casi, cada dos por tres, como si estuviese algo mal diseñado al pasar túneles.
En mi caso sin cafetería, que creo ya había leído al comprar. Sustituido por entre vagón y vagón, de vez en cuando una máquina vending a precio aeropuerto, con 4 cosas insanas, nada de sandwich... No vi máquina de café si la había. Todo frío.
Lo peor de todo no era ya el cobro sistemático para sentarse juntos los amigos (para al menos estar en el mismo coche), ni las restriciones de equipajes notables (10€ añadir una maleta extra, creo recordar 15€ si la compras online tras la compra de billete y 20 si lo compras en persona hasta media hora antes)... lo peor sin duda era la tremenda dureza de los asientos. Eran a nivel de bus urbano, para un traslado de 15 minutos, no para 3h y media que duró. El ojo ciego cuadrado.
EN RESUMEN, y no pretendo decir que estas opciones lowcost (en mi caso ni precio ventajoso le saqué al viaje) sean malas, lo malo es que si las eliges has de saber a lo que vas y cómo será el viaje. No sé que experiencias tendrán el resto con las otras empresas, pero si va por aquí el futuro de la alta velocidad, además de evitarlas salvo que el horario sea imperativo, volveré al autobús acolchado a una mala.
La francesa Ouigo
La itlaiana Iryo
La de RENFE llamada Avlo
Hace tiempo había leído un artículo al respecto, y parecía que eran un poco como RaynAir y compañía.
Dejas a un lado ciertas comodidades, medidas de equipajes,... en post de usar sus horarios/rutas y menor coste.
Pensé... estupendo, algo de competencia viene bien y conseguimos más horarios a elegir.
Pues ya me ha tocado, sin querer, pues no sabía que había comprado un AVLO de RENFE.
Cuando leí las siglas imaginé que era como decir un Avant, un ... el nombre del modelo del coche.
Es la única lowcost en mi provincia, hasta que operen el resto a finales de 2026. He buscado algo de info y mis pareceres no son errados, demasaida gente con la mismas experiencias, que cuento para que no le pase a gente el comprarlo sin saber a lo que va.
Porque las lowcost están genial si sabes a lo que vas y el coste es notablemente bajo.
El ruido abordo durante las más de 3h que duró mi viaje, era bastante por enciama de lo que uno está acostumbrado para un tren. Era como si tuviese el coche una ventanilla abierta.
La climatización era buena, eso sí. Tenia usb y enchufe estándar.
En lugar de 2 y 2 filas de asientos, eran 3 y 2 en todos los coches.
Esa plaza no sale de la nada. Se notaba mucho la falta de espacio a lo ancho. A lo largo lo vi aceptable. Pero la gente que estaba enfrentada, que eran muchas las mesas, se les veía realmente incómodos.
Las pantallas de información, todo muy nuevo, estaban mal!!. Marcaban temperaturas del exterior y velocidades de viaje disparatadas.
Y esto me hace preguntarme, porque no se arregla, qué más fallos habrá que no vea, si esto tan simple y vistoso no parece preocupar en solucionar no quiero ni pensar lo que habrá por atrás.
Molestias en los oídos, y nunca me pasa casi, cada dos por tres, como si estuviese algo mal diseñado al pasar túneles.
En mi caso sin cafetería, que creo ya había leído al comprar. Sustituido por entre vagón y vagón, de vez en cuando una máquina vending a precio aeropuerto, con 4 cosas insanas, nada de sandwich... No vi máquina de café si la había. Todo frío.
Lo peor de todo no era ya el cobro sistemático para sentarse juntos los amigos (para al menos estar en el mismo coche), ni las restriciones de equipajes notables (10€ añadir una maleta extra, creo recordar 15€ si la compras online tras la compra de billete y 20 si lo compras en persona hasta media hora antes)... lo peor sin duda era la tremenda dureza de los asientos. Eran a nivel de bus urbano, para un traslado de 15 minutos, no para 3h y media que duró. El ojo ciego cuadrado.
EN RESUMEN, y no pretendo decir que estas opciones lowcost (en mi caso ni precio ventajoso le saqué al viaje) sean malas, lo malo es que si las eliges has de saber a lo que vas y cómo será el viaje. No sé que experiencias tendrán el resto con las otras empresas, pero si va por aquí el futuro de la alta velocidad, además de evitarlas salvo que el horario sea imperativo, volveré al autobús acolchado a una mala.