Lo que hubiera pasado es que Franco habría firmado los acuerdos de Madrid en 1944 en vez de en 1953, y Eisenhower hubiera cumplido su sueño de conocer al Caudillo mucho antes.
No había ninguna motivación por parte de los Aliados para combatir a los españoles, ni ninguna motivación por parte de los españoles para combatir a los Aliados. En cuanto Franco hubiera detectado movimiento inusual allende los Pirineos, hubiera firmado los papeles que hubiera hecho falta para evitar la oleada turística. Y con Churchill y Eisenhower de su parte, no lo habría tenido muy difícil.
Recordad, amigos:
Franco salvó su pandero en Noviembre de 1942, cuando no hizo absolutamente nada mientras la flota estadounidense pasaba por delante de sus morros para invadir el magreb.
Eisenhower, en su primera gran operación, estaba con el pandero en tensión temiendo que Franco hiciera algo y le jodiera el plan. Por mucho que Churchill le hubiera explicado a Eisenhower que Franco no iba a hacer nada, y que aunque Franco quisiera hacer algo tampoco podía hacer nada, Eisenhower no se dejó convencer. Y en Noviembre de 1942, Eisenhower estaba en periodo de prueba, un exceso de bajas hubiera supuesto que le sustituyeran por Devers (que además era mas guapo) y que le enviaran a dirigir un almacén de suministros en Alabama.
Por eso, cuando todo salió bien y Franco no hizo nada, Eisenhower respiró aliviado y se sintió personalmente en deuda con el Caudillo. Y por eso en cuanto Eisenhower se convirtió en Presidente de EEUU, lo primero que hizo fue devolverle a Franco el favor.