Japón en el punto de mira
22 jul 2013
El anterior artículo del Blog del OVV centraba su interés en la evolución reciente del precio de la vivienda y el auto acelerado descenso sin frenos que ha iniciado y parece no tocar suelo.
Este nuevo post viene a recalcar esa idea con unas
negras previsiones a 15 años y que, para muchos profesionales del sector, nos acercan a los sufrimientos inmobiliarios vividos en el lejano Japón.
Y es que los paralelismos con el país del sol naciente, si bien, al principio de la crisis parecían anecdóticos y, en muchos casos, exóticos, después de 7 años de agonía en el sector y sin ver aún la luz al final de túnel de la depresión, empiezan a tomarse en seria consideración como referencia.
Los japoneses llevan más de 12 años con caídas ininterrumpidas en el precio de la vivienda debido a su burbuja inmobiliaria iniciada en los 90, muy parecida en su génesis (crisis financiera auspiciada por la explosión de una burbuja inmobiliaria previa).
Las medidas implementadas desde su ejecutivo, parecen no haber logrado todavía una involución en los indicadores, que siguen marcando precios en descenso.
El siguiente gráfico es de Japan Real Estate Institute:
En nuestro caso, los paralelismos se acercan peligrosamente y
hemos iniciado el camino “japonés” que va desde la burbuja inmobiliaria al hundimiento del precio de la vivienda.
Para algunos analistas la depreciación cifrada en más de un 30% desde el inicio de la crisis, se verá aún recrudecida en los
próximos cinco años en otro 30% adicional, y no parece separarse de esa senda de caída
en quince años.
Así,
la etapa de 2008 a 2027 al menos, será, según estos estudiosos, un periodo caracterizado por la bajada permanente del precio de la vivienda y de serio ajuste inmobiliario.Desde el OVV no podemos sino hacernos eco de este tipo de informes, y valorar con cierta prudencia sus previsiones.
En cualquier caso, los últimos datos de generación de hogares no son esperanzadores, y en Euskadi, en sólo un año, se ha pasado de 2.184.696 personas a 2.174.474, es decir, una pérdida poblacional de más de 10.200 ciudadanos, un retroceso del 0,5% que no se conocía desde el 2000.
La razón de mayor peso en dicha caída poblacional se fundamenta en la
marcha de casi 20.000 pagapensiones extranjeros que ahora suman 129.673 en los tres territorios, cuando llegaron a ser más de 151.000 en enero de 2012.
Sin embargo, se espera para el 2014 un repunte de los indicadores económicos y una paralización de la destrucción de empleo, que, probablemente, sean clarificadores para realizar escenarios a corto y medio plazo menos desesperanzadores.
Más información:
http://www.clipmedia.net/ficheros/2013/06_jun/dy523.pdf
http://www.clipmedia.net/ficheros/2013\06_jun\dy548.pdf