¿Os sentís mejor cuando salís de la ciudad?

Dormir mejor, respirar mejor, menos cansancio por exceso de estímulos, menos alerta por exceso de gente, más cercanía a la naturaleza...Pues claro, shishi, de hecho lo que me agota es cuando me tengo que pasar unos días en la ciudad, me drena, parece que están hechas para eso, para chuparte la energía y luego tirarte totalmente exprimido a la sarama como si fueras un calippo de limón.
 
Yo vivo en ciudad y necesito periódicamente salir al campo, salir aunque sea un rato, a pasear rodeado de árboles. Es como respirar.
 
Empecé este post el 22 de noviembre recién llegado de la costa y en plenas facultades físicas. Estamos a 2 diciembre, y ya vuelvo a notar ciertos "problemillas" que han vuelto poco a poco. Quizá deba cambiar algo en mi día a día, aunque me resulta muy extraño que si salgo a zonas sin tanta contaminación acústica, de aglomeraciones, ralea, con aire más limpio y sobre todo teniendo el mar cerca, mi cuerpo responde dándome una fuerza y energía que no se de donde ha salido.

Ayer se me ocurrió la feliz idea de ir a un Lidl a mediodía para comprar un par de cosas. En solo un rato comprendí porque necesito largarme de la ciudad cuando antes. Masificación, gente maleducada casi arrollándote, miradas desafiantes y mucho ruido...

Y por si fuera poco, en la cola se me coló una señora con dos niños por el morro (no quise montar un espectáculo). Pero al final a la señora le tocó esperar, porque la que tenía delante nos tuvo más de 10 minutos esperando porque no estaba de acuerdo con el descuento que le habían hecho. Una tía de unos 45 años con el pelo gris y gafas de maestra (típica feminista amargada) que llevaba una de esas hojas de cupones, y hasta que no le cuadró no soltó a la cajera. Y todo para ahorrarse 1,60 euros de cosa.

Al salir del parking un atasco de huevones solo para salir del centro comercial. Y esto un domingo cualquiera, porque ya ni menciono el día a día de vivir en una gran ciudad. Si es que te tienes que acabar poniendo malo por huevones... roto2

El meollo del asunto es que el ser humano no esta hecho para una vida masificada, nuestros ancestros vivieron miles de años en un mundo con una bajísima densidad de población. Estar rodeado de una marea humana nunca fué nuestra condición natural, es normal pues que nuestro cerebro primitivo lo rechace, los humanos se organizaban en pequeños grupos o clanes donde todo el mundo se conocía o era familia extendida. Vernos forzados a compartir espacio con desconocidos es algo claramente antinatural pero que hasta cierto punto, pasando un extenso proceso de civilización y socialización, es tolerable.

Algunos dirán que siempre han existido ciudades o algun tipo de nucleo urbano desde que existe civilización, es cierto, pero no se pueden comparar ciudades que tenían unos pocos miles de habitantes durante el imperio romano o la edad media, con varios millones en la era tecnoindustrial. Una ciudad de la antigüedad sería considerada poco más que un pueblucho bajo nuestra óptica moderna, con quizás la excepción de Roma que era un caso aparte y llegó a superar el millón de habitantes en su máximo apogeo. Pero bueno, así les fué, demostrando que es imposible de sostener ese tipo de desarrollo exponencial.

Volviendo al tema, lo que te ocurrió en el supermercado es que tu cerebro primitivo interpreta que estas rodeado de potenciales enemigos y en cierta forma es cierto, solo que en vez de partiros la cabeza a garrotazos pues son malas miradas o empujones, lo cual te genera una respuesta de lucha o huida. Tu instinto te esta diciendo que hay que largarse de ahí cagando leches o empezar a repartir galletas al primero que se te cuele o empuje, pero no puedes, tienes que terminar la compra y lo de utilizar algo tan natural como la violencia para resolver disputas esta muy mal visto en esta sociedad moderna de gaias y lo que es peor, puede tener consecuencias legales. Básicamente estas ATRAPADO con lo cual es normal que te genere estrés, ansiedad, altos niveles de cortisol, adrenalina etc. Eso se puede soportar puntualmente pero cuando te expones a diario a estas situaciones a la larga te mata física y mentalmente, no es ninguna broma.

La gente se toma pastillas para la ansiedad o se pasa años en terapia porque no logran entender esto tan sencillo. Cuanto más te apartes de aquello que somos realmente, más vas a sufrir. Nuestro destino no es alcanzar las estrellas, es volver a estar con el clan alrededor de una fogata en la caverna.
 
Añado, hace un tiempo le dije a un conocido que me daba literalmente ardor de estomago pisar la gran ciudad.

Me respondió, totalmente en serio, que si me encontraba bien, que si no me planteaba ir a terapia, etc.

Como si sentir rechazo hacia lo antinatural fuese algún tipo de problema mental.

Lo más increíble es que me lo decía un urbanita que precisamente tuvo que ir al psicólogo por una serie de movidas.
 
Pues a mí el campo me aburre un huevo.
Lo ideal es vivir a pocos kilómetros de una gran ciudad.
 
Pues es evidente, qué pregunta!

Estar cocinando escuchando pájaros comunicarse o ruidos de compresor.

Las ciudades son horribles, el nivel de sobrestimulo sólo lo aguanta uno siendo joven.
 
la única ventaja de vivir en una gran ciudad es que en las apps de amar pillas a más tías. los que vivimos fuera de ciudades no lo tenemos tan fácil.

quitando eso, estar en una gran ciudad debe ser duro porque no puedes escapar de la gente asquerosa masculina.

yo vivo en un pueblo cerca de la ciudad de granada de 20.000 habitantes y no hay ni un alma por la calle y con una criminalidad del cero por ciento. de querida progenitora. pero eso, se echa de menos el acceso a mujeres nada más.

en las ciudades bajas a la calle y está lleno de macheteros,jovenlandeses,latinoamericanos...

y mujeres poquísimas atractivas y las que haya van todos detrás de ellas para preñar y/o se meten a pilinguis y se forran

tampoco te pienses que estar en una ciudad es algo muy distinto

las de los pueblos son mas fáciles y aman mas fácil

en las ciudades o son derroidas ama etnianos jovenlandeses latinoamericanos de los barrios o son pijas que se piensan princesas en los barrios con mas dinero

y aparte de eso todo lleno de calvos malotes asquerosos,chitanos-jovenlandeses-latinoamericanos macheteros...
 
No sabía muy bien donde poner este post, y hasta he pensado en escribirlo en conspiraciones. Sin embargo, lo que voy a escribir es una realidad que llevo probando hace algún tiempo. En este último "experimento" lo he podido volver a confirmar. Sin embargo, hay muchas variables a lo que voy a contar, por lo que tampoco tengo una respuesta a lo que me pasa. Por eso he puesto el título del hilo como pregunta.

No me voy a enrollar mucho, pero llevo ya tiempo viendo que cuando estoy un largo periodo de tiempo en Madrid (donde vivo), desarrollo algunos síntomas que merman mi estado físico. Aunque no voy al gimnasio desde 2020, intento hacer todo el ejercicio que puedo, sobre todo andar. No fumo ni bebo y cuido bastante mi alimentación (aunque algunas veces me paso con el dulce). Sin embargo, llega un momento donde empiezo a notar dolores de cabeza, síntomas de tensión alta (enrojecimiento de la cara), dolores de estómago y molestias en las articulaciones. De hecho, he tenido algunos sangrados por la fosa nasal izquierda sin motivo aparente. No estoy medicado ni me han hecho PCR.

Pero ya noté en su día que cuando me cojo el coche y me voy de Madrid por unos días, se produce el milagro. El primer día quizá todavía tengo algún síntoma pero rápidamente recupero la salud de forma total. Pensé que quizá era casualidad, pero he estado unos días en Levante (llegué ayer) y se ha repetido el mismo patrón.

El primer día tuve esas "molestias", pero al segundo es como si me hubieran inyectado adrenalina en vena. Todos los dolores y molestias simplemente desaparecieron, y me he pegado unas panzadas de andar (viendo pisos y haciendo algo de turismo) de alucinar. De hecho, me he estropeado un poco los pies de andar tanto. También he comido platos fuertes y muy picantes, y ningún problema de estómago.

Lo que quiero decir, es que me da la impresión que hay algo donde vivo que sospecho que podría estar jodiéndome. En el edificio de al lado hay una ristra de antenas de todo tipo que ya pusieron hace tiempo (llevo aquí unos tres años). He llegado a pensar que podrían ser las antenas, que me afectan más que a otras personas. No creo que sea el agua o la contaminación, pero la realidad es que hay "algo" que si parece que mina poco a poco mi estado de salud habitual.

Hoy estoy de querida progenitora, pero porque acabo de llegar. El problema es que siguiendo la pauta, dentro de un mes igual ya empezarán los síntomas de los huevones, como ya ha ido pasando en anteriores ocasiones. También he pensado que puede ser psicológico ya que la ciudad me acaba quemando mucho, lo cual baja las defensas...

De todos modos y como digo siempre, lo que no cure el mar, no lo cura nada. ¿Alguien más ha tenido estos síntomas que desaparecen simplemente alejándose unos días de la ciudad? Perdón por el tocho...
Sangrar por la nariz es muy mal asunto, es tensión muy muy alta. Ojo
 
Añado, hace un tiempo le dije a un conocido que me daba literalmente ardor de estomago pisar la gran ciudad.

Me respondió, totalmente en serio, que si me encontraba bien, que si no me planteaba ir a terapia, etc.

Como si sentir rechazo hacia lo antinatural fuese algún tipo de problema mental.

Lo más increíble es que me lo decía un urbanita que precisamente tuvo que ir al psicólogo por una serie de movidas.

"Tío, qué puñetero ardor de estomago las esquinas siempre manchadas y apestando a meados de perro", le dije a uno, y me miró con cara de besugo, como si me estuviese quejando de que el sol saliera por el este.

No tienen ni idea de las cosas que han naturalizado como lo más normal, siendo detalles de masificación e inhumanidad indecentes que te van hurtando estética y calidad de vida.
 
Última edición:
cada vez mas

a las ciudades les quedan dos telediarios
 
Vivo en un pueblo, y andando tengo el campo a 5 minutos. Coger el amoto y enfilar caminos, subir cerrancos, etc, eso? eso es media vida. Ni los civiles ni los locales dicen nada porque nos conocemos todos y hombre, uno tampoco está cometiendo un delito.

Salir con esto, entre lo que tira, cómo suena, y... Pasa uno un domingo por los bares llenos de tías y a saber como se les pondrá el jigo. Ni pensarlo quiero.

Una Montesa 360 H6 del 84. Está restaurada.


S5030391.jpg
 
Última edición:
Volver