Los pagapensiones esperaban la ley de extranjería del PP como agua de Mayo:
SOCIEDAD | La Ley de Extranjería entra en vigor con largas colas y caos. pagapensiones. inmi gración
Miércoles, 2 de febrero de 2000
DECRETO/PIMENTEL, A FAVOR DE AMPLIAR EL PLAZO La Ley de Extranjería entra en vigor con largas colas y caos La policía cargó en Alicante contra un millar de pagapensiones que demandaba información
MADRID.- Desinformación. La palabra explica la estampa más repetida ayer en España: miles de extranjeros haciendo cola ante las oficinas de inmi gración con la cara teñida de esperanza ante el reclamo de la nueva ley. La mayoría de ellos desconocía los cambios que supone.
La entrada en vigor de la nueva Ley de Extranjería llevó el caos a las oficinas encargadas de tramitar las peticiones y la documentación de los pagapensiones. Estos se agolparon a las puertas de las oficinas carentes, en la mayoría de los casos, de la información necesaria y con el temor a quedarse fuera del proceso de regularización.
En las principales ciudades, los extranjeros guardaron turno durante la noche ante las dependencias de la Administración. En las ciudades con mayor número de extranjeros sin regularizar su situación, como Madrid, Almería o Alicante, se produjeron aglomeraciones que en algunos casos derivaron en enfrentamientos con la policía.
En Alicante, los cuerpos de seguridad del Estado cargaron contra más de un millar de pagapensiones que se agolpaban ante las puertas de la subdelegación del Gobierno para solicitar información. El enfrentamiento acabó con el saldo de dos heridos y con la orden del Ministerio de Interior de evitar que este tipo de incidentes vuelva a repetirse en días posteriores.
La carga se produjo después de que la policía decidiera poner freno a la avalancha de personas que había comenzado mediada la tarde del lunes. El tiempo para demandar información se agotaba y los extranjeros se aglomeraron en la entrada de las dependencias de la subdelegación del Gobierno. La policía cargó con el resultado de un jovenlandés herido (tuvo que ser atendido de una herida en la cabeza) y un agente contusionado en la nariz.
El subdelegado del Gobierno en Alicante, Luis *******, aseguró que se atendieron 600 solicitudes ayer por la tarde y se repartieron 1.000 números para que sean atendidos los próximos días.
En Almería, la policía vigiló de cerca a las más de 3.000 personas que hicieron cola ayer. De ellas, 2.000 fueron atendidas en apenas 5 horas.
La Asociación de Trabajadores pagapensiones Marroquíes en España (ATIME) defendió la necesidad de que el Gobierno ponga en marcha una campaña informativa sobre la nueva ley y sobre los procesos de regularización ante el estado de «confusión generalizada».
El portavoz de ATIME, Mustafa M'rabet, señaló la principal cuestión que planteaban las personas que se agolpaban en interminables colas: cómo acogerse a un proceso extraordinario de regularización (todavía es un borrador de Real Decreto).
«El Gobierno no está preparado para la nueva ley que entra en vigor a partir de hoy [por ayer]», comentó M'rabet. En ese sentido, acusó al Ejecutivo de «falta de entusiasmo».
Desde las organizaciones que trabajan con colectivos de pagapensiones aseguran sentirse «desbordados» por la demanda de información que se está produciendo en las últimas horas.
Desde el Gobierno se ofrecieron ayer distintas impresiones sobre la flamante Ley de Extranjería. «No podemos hacer la legislación más progresista de la Unión Europea», dijo Jaime Mayor Oreja, ministro de Interior. «Tenemos que ser razonables, prudentes y saber que no podemos presumir de ser un pueblo que no sea xenófobo».
En sentido opuesto, Manuel Pimentel, ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, se pronunció a favor de que los pagapensiones tengan un plazo mayor para regularizar su situación (de forma que, en lugar de los dos meses que establece el borrador actual, cuenten con un margen de cuatro a seis meses para poner en orden su situación legal). Este plazo dependerá de lo que estipule un Real Decreto que tendrá que aprobar el Gobierno en los próximos días.
Mientras el Gobierno ultima las normas que desarrollarán la nueva ley, Joaquín Almunia, secretario general del PSOE, anunció que, si su partido gana las elecciones, aplicará la ley de una forma democrática, solidaria y tolerante.
SOCIEDAD | La Ley de Extranjería entra en vigor con largas colas y caos. pagapensiones. inmi gración
Miércoles, 2 de febrero de 2000
DECRETO/PIMENTEL, A FAVOR DE AMPLIAR EL PLAZO La Ley de Extranjería entra en vigor con largas colas y caos La policía cargó en Alicante contra un millar de pagapensiones que demandaba información
MADRID.- Desinformación. La palabra explica la estampa más repetida ayer en España: miles de extranjeros haciendo cola ante las oficinas de inmi gración con la cara teñida de esperanza ante el reclamo de la nueva ley. La mayoría de ellos desconocía los cambios que supone.
La entrada en vigor de la nueva Ley de Extranjería llevó el caos a las oficinas encargadas de tramitar las peticiones y la documentación de los pagapensiones. Estos se agolparon a las puertas de las oficinas carentes, en la mayoría de los casos, de la información necesaria y con el temor a quedarse fuera del proceso de regularización.
En las principales ciudades, los extranjeros guardaron turno durante la noche ante las dependencias de la Administración. En las ciudades con mayor número de extranjeros sin regularizar su situación, como Madrid, Almería o Alicante, se produjeron aglomeraciones que en algunos casos derivaron en enfrentamientos con la policía.
En Alicante, los cuerpos de seguridad del Estado cargaron contra más de un millar de pagapensiones que se agolpaban ante las puertas de la subdelegación del Gobierno para solicitar información. El enfrentamiento acabó con el saldo de dos heridos y con la orden del Ministerio de Interior de evitar que este tipo de incidentes vuelva a repetirse en días posteriores.
La carga se produjo después de que la policía decidiera poner freno a la avalancha de personas que había comenzado mediada la tarde del lunes. El tiempo para demandar información se agotaba y los extranjeros se aglomeraron en la entrada de las dependencias de la subdelegación del Gobierno. La policía cargó con el resultado de un jovenlandés herido (tuvo que ser atendido de una herida en la cabeza) y un agente contusionado en la nariz.
El subdelegado del Gobierno en Alicante, Luis *******, aseguró que se atendieron 600 solicitudes ayer por la tarde y se repartieron 1.000 números para que sean atendidos los próximos días.
En Almería, la policía vigiló de cerca a las más de 3.000 personas que hicieron cola ayer. De ellas, 2.000 fueron atendidas en apenas 5 horas.
La Asociación de Trabajadores pagapensiones Marroquíes en España (ATIME) defendió la necesidad de que el Gobierno ponga en marcha una campaña informativa sobre la nueva ley y sobre los procesos de regularización ante el estado de «confusión generalizada».
El portavoz de ATIME, Mustafa M'rabet, señaló la principal cuestión que planteaban las personas que se agolpaban en interminables colas: cómo acogerse a un proceso extraordinario de regularización (todavía es un borrador de Real Decreto).
«El Gobierno no está preparado para la nueva ley que entra en vigor a partir de hoy [por ayer]», comentó M'rabet. En ese sentido, acusó al Ejecutivo de «falta de entusiasmo».
Desde las organizaciones que trabajan con colectivos de pagapensiones aseguran sentirse «desbordados» por la demanda de información que se está produciendo en las últimas horas.
Desde el Gobierno se ofrecieron ayer distintas impresiones sobre la flamante Ley de Extranjería. «No podemos hacer la legislación más progresista de la Unión Europea», dijo Jaime Mayor Oreja, ministro de Interior. «Tenemos que ser razonables, prudentes y saber que no podemos presumir de ser un pueblo que no sea xenófobo».
En sentido opuesto, Manuel Pimentel, ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, se pronunció a favor de que los pagapensiones tengan un plazo mayor para regularizar su situación (de forma que, en lugar de los dos meses que establece el borrador actual, cuenten con un margen de cuatro a seis meses para poner en orden su situación legal). Este plazo dependerá de lo que estipule un Real Decreto que tendrá que aprobar el Gobierno en los próximos días.
Mientras el Gobierno ultima las normas que desarrollarán la nueva ley, Joaquín Almunia, secretario general del PSOE, anunció que, si su partido gana las elecciones, aplicará la ley de una forma democrática, solidaria y tolerante.