Nueva Zelanda exige a los ciudadanos que denuncien como "terroristas" a los "teóricos de la conspiración" que se "oponen a las políticas del Gobierno"

El autoritario gobierno de izquierdas de Nueva Zelanda ha ordenado a los ciudadanos que denuncien a sus amigos y familiares a la policía si sospechan que se oponen a las políticas del gobierno, incluidas las medidas el bichito.

Según la literatura publicada por el gobierno de Jacinda Ardern, infiltrado por la FEM, los ciudadanos neozelandeses sospechosos de ser "teóricos de la conspiración" serán investigados como terroristas.

Rebecca Kitteridge, directora del Servicio de Inteligencia de Seguridad de Nueva Zelanda, explicó que existen "docenas de indicadores" que sugieren que un familiar o amigo ha sido "radicalizado" por las teorías de la conspiración y podría estar planeando un atentado terrorista.

Cualquiera que se oponga a "las políticas del gobierno que se interpreten como vulneradoras de derechos" o a "las medidas de el bichito que tomó el gobierno" debe ser denunciado e investigado como terrorista, según Kitteridge. VER:



Bajo el liderazgo de la Primera Ministra Jacinda Ardern, Nueva Zelanda se ha situado a la vanguardia de la agenda autoritaria de izquierdas del Foro Económico Mundial. Se ha despojado a los ciudadanos de sus derechos de forma sistemática y despiadada, y ahora se les dice que cuestionar el autoritarismo del gobierno es una forma de terrorismo.

En Nueva Zelanda no hay lugar para el debate público. Cualquiera que tenga un punto de vista diferente al del gobierno de Ardern, infiltrado por la FEM, es considerado un enemigo.

Ardern señaló el cambio del gobierno al modo fascista en julio, diciendo a los ciudadanos que el gobierno es su "única fuente de verdad", y "a menos que lo escuchen de nosotros, no es verdad".



Tiempos de miedo en Nueva Zelanda. Pero, ¿les sorprende? Estamos hablando de un Estado autoritario de extrema izquierda, dirigido por la joven líder mundial Jacinda Ardern, en el que se dice a los ciudadanos que confíen plenamente en el gobierno y se calumnia de "teóricos de la conspiración" e investiga como terroristas a quienes se atreven a pensar por sí mismos y a buscar fuentes alternativas de información.

Este es el futuro del mundo si Klaus Schwab se sale con la suya.



Según la extrema izquierda de Ardern, los ciudadanos deben "descartar cualquier otra cosa" que oigan, a menos que haya sido emitida por el gobierno.

Judgement day dijo:

Parece ser que es de 2020 eso, lo que no quita su gravedad...

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Y todavía no está presa.
Es como Pedro, macarras trajeados.