Porque es la única manera de poder existir en la realidad. Ya que no es habitable... Este discernir metafísico, discierne el artículo, comentado...
6 septiembre, 2024
El científico de la NASA Richard John Terrile cree que nuestra existencia es simplemente una simulación. Nuestra conciencia no es mágica… en algún momento puede ser simulada por una computadora, o en otras palabras, replicada. En palabras simples, ¡podemos crear un Dios!
Puede que Matrix fuera ciencia ficción de Hollywood, pero algunos científicos y filósofos se toman en serio la llamada “hipótesis de simulación”: la idea de que todo lo que vemos podría ser una creación artificial.
Rich Terrile es un científico de la Voyager que descubrió varias lunas de Saturno, Urano y Neptuno. Trabaja para el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA. Además, tomó las primeras fotografías de otro sistema solar alrededor de la estrella cercana Beta Pictoris.
Según Rich, los principios de la mecánica cuántica apoyan esta hipótesis de simulación. Las partículas no tienen un estado específico si no son visibles. En otras palabras, vemos lo que esperamos ver, y esto sucede cuando lo miramos. La esencia de la teoría de Rich es que un “programador” del futuro diseñó nuestra realidad para simular el curso de lo que el programador considera historia antigua, por la razón que sea, tal vez porque está aburrido.
Rich define la ciencia como el descubrimiento del marco matemático que explica nuestras observaciones del mundo físico.
Destaca que el universo es asombrosamente matemático, es decir, que puede describirse y comprenderse mediante leyes y principios matemáticos. Esto no es una condición necesaria, pero es un aspecto fundamental de nuestro universo.
Cita a Einstein, a quien le parecía incomprensible que el mundo fuera comprensible. También hace referencia al tratado de Eugene Wigner sobre la “irrazonable eficacia de las matemáticas en el mundo natural”, que describe este fenómeno como un “milagro” o un “regalo”.
Dice que el universo entero, incluidas las constantes físicas, se puede describir en unas cuantas hojas de papel.
– Esto permite simular el universo en una computadora más pequeña que el universo mismo.
– El universo está “pixelado”, lo que significa que tiene un número finito de elementos (longitud de Planck) y no se puede dividir más.
– Todos los aspectos del universo (longitud, masa, energía, tiempo, volumen) son finitos y discretos.
– El universo tiene un número finito de estados, lo que lo hace computable.
Rich Terrile afirma: “Incluso las cosas que consideramos continuas (tiempo, energía, espacio, volumen) tienen un límite finito en cuanto a su tamaño. Si ese es el caso, entonces nuestro universo es computable y finito. Esas propiedades permiten simular el universo”.
Rich analiza lo que se necesita para ser ateo, empezando por una teoría del origen independiente de un creador. La ciencia ofrece la teoría del Big Bang, aunque tiene algunas probabilidades improbables y epiciclos. Menciona el concepto de cerebros de Boltzmann, que podrían formarse con más frecuencia que un universo entero. A pesar de algunos problemas con la teoría, la ciencia tiene una buena historia del origen.
Para ser ateo, también hay que creer que Dios no existe. Rich no puede demostrar nada negativo, pero da la vuelta a la perspectiva: ¿puede demostrar que Dios puede existir dentro de las leyes de la ciencia, sin milagros ni magia? La respuesta es sí, debido a la naturaleza matemática del universo. Rich puede simular un universo, creando un escenario en el que cumple los requisitos de Dios tal como se describen en el Catecismo de Baltimore. Como programador, puede crear una simulación con autoconciencia artificial, convirtiéndose esencialmente en el creador de un universo.
Rich cree que estas tres áreas clave: computación avanzada, inteligencia artificial y realidad virtual, pueden unirse para dar a los humanos un poder divino sobre la mente y la materia, permitiéndonos crear y diseñar nuestros propios universos.
“En este momento, las supercomputadoras más rápidas de la NASA funcionan a una velocidad que duplica la del cerebro humano. Si se hace un cálculo simple utilizando la Ley de Moore, se descubrirá que, en el plazo de una década, estas supercomputadoras tendrán la capacidad de calcular toda la vida humana de 80 años, incluidos todos los pensamientos concebidos durante esa vida, en el lapso de un mes”, afirmó Rich.
“Creo que sí”, afirma. “Creo que estos sistemas de información tan avanzados, que van mucho más allá de las capacidades de un ser humano, son la manera de resolver estos problemas”.
A menos que creas que hay algo mágico en la conciencia (y yo no lo creo, creo que es el producto de una arquitectura muy sofisticada dentro del cerebro humano), entonces tienes que asumir que en algún momento se puede simular mediante un ordenador o, en otras palabras, se puede replicar. Hay dos formas de lograr un cerebro humano artificial en el futuro. Una de ellas es mediante ingeniería inversa, pero creo que sería mucho más fácil desarrollar un circuito o una arquitectura que pudiera volverse consciente. Tal vez en los próximos diez a treinta años podamos incorporar la conciencia artificial a nuestras máquinas.
Ahora prepárense: en 30 años esperamos que una PlayStation (sale una nueva PlayStation cada seis u ocho años, por lo que esta sería una PlayStation 7) sea capaz de calcular aproximadamente 10.000 vidas humanas simultáneamente en tiempo real, o aproximadamente una vida humana en una hora.
¿Cuántas PlayStations hay en todo el mundo? Más de 100 millones, sin duda. Pensemos en 100 millones de consolas, cada una de ellas con 10.000 humanos. Eso significa que, para entonces, conceptualmente, podría haber más humanos viviendo en PlayStations que humanos viviendo en la Tierra hoy.
¿Existe entonces la posibilidad de que estemos viviendo en un juego super avanzado en la PlayStation de algún fulastre con los ojos inyectados en sangre? Rich dijo: “Sí”.
En la actualidad, existen dos enfoques principales para comprender y replicar la conciencia. Uno de ellos consiste en aplicar ingeniería inversa al cerebro, intentando trazar y comprender su intrincado funcionamiento. Otro enfoque, que utiliza el laboratorio de Rich, consiste en desarrollar redes neuronales artificiales mediante variaciones y selecciones aleatorias para ver si pueden imitar la autoconciencia del cerebro.
En 2015, Rich estimó que podrían pasar entre 10 y 30 años hasta que se lograra la conciencia artificial. Luego pasó a hablar de la realidad virtual y sus aspectos matemáticos. Si dos cosas son matemáticamente indistinguibles, se consideran lo mismo. Esto lo lleva a preguntarse si un entorno perfectamente simulado es lo mismo que el real. Si un mundo simulado puede replicar perfectamente las experiencias sensoriales del mundo real, entonces, en teoría, los mundos real y simulado podrían ser idénticos.
Rich propuso un experimento mental en el que, si encerráramos todo nuestro cuerpo y sustituyéramos las entradas sensoriales por una simulación perfectamente realista, tendríamos que preguntarnos si el mundo real y el mundo simulado serían indistinguibles. Si la simulación pudiera recrear todas las experiencias sensoriales con exactitud, podría ser tan real como el mundo real.
Especuló sobre la posibilidad de cargar nuestra conciencia en computadoras. En tal escenario, no necesitaríamos cuerpos físicos ni cerebros, solo mentes interactuando con una máquina capaz de simular la realidad. Esta realidad simulada podría, teóricamente, manipular el tiempo y las probabilidades, creando cualquier tipo de universo o escenario imaginable.
Después de pensarlo, me di cuenta de que un creador de un universo es capaz de cambiar las leyes de la física y esculpir lo que sea que ese universo sea, lo cual puedo hacer en una simulación por computadora. De hecho, tal vez pueda hacerlo pronto con seres conscientes.
Tal vez, o tal vez simplemente los dejaría ir. Vivirían el resto de sus vidas en un período de tiempo increíblemente corto. Tal vez podría cambiar las leyes físicas. Podría hacer que vivieran en lugares tanto hospitalarios como inhóspitos. Podría hacer que estuvieran completamente solos. Tal vez esa sea una condición límite para nosotros y explique por qué no hay extraterrestres.
Daros cuenta que vivimos en el concepto de LA PARTÍCULA DE DIOS... y vivimos en la molécula de la vida: La energía, es la única existencia real... Pero necesitamos recrear su irrealidad, el concepto de metaverso, para poder existir en tan in habitable, habita... Motivo de compartir el comentario. Al pensar que la partícula, es la existencia, no hemos comprendido la anti simetría, plausible, que EL UNIVERSO, ha logrado programar, pero sin inteligencia artificial, aliens ni Dios. Dios es el que ha razonado toda la comprensión de lo qué es EL UNIVERSO. Y el propio UNIVERSO, ha programado, con el ente de EL PENSAMIENTO, la fuerza impulsiva de la energía para superarse en su naturaleza dispersa e in animada, lograr destruir y a la vez tras*formar su naturaleza. Esta metafísica es la más coherente con lo que tangiblemente podemos ver y percibir... Y la física cuántica es su hecho... Veremos.
Este científico de la NASA cree que nuestra existencia es solo una simulación: nuestra conciencia podría ser simulada por una computadora
6 septiembre, 2024
El científico de la NASA Richard John Terrile cree que nuestra existencia es simplemente una simulación. Nuestra conciencia no es mágica… en algún momento puede ser simulada por una computadora, o en otras palabras, replicada. En palabras simples, ¡podemos crear un Dios!
Puede que Matrix fuera ciencia ficción de Hollywood, pero algunos científicos y filósofos se toman en serio la llamada “hipótesis de simulación”: la idea de que todo lo que vemos podría ser una creación artificial.
Rich Terrile es un científico de la Voyager que descubrió varias lunas de Saturno, Urano y Neptuno. Trabaja para el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA. Además, tomó las primeras fotografías de otro sistema solar alrededor de la estrella cercana Beta Pictoris.
Según Rich, los principios de la mecánica cuántica apoyan esta hipótesis de simulación. Las partículas no tienen un estado específico si no son visibles. En otras palabras, vemos lo que esperamos ver, y esto sucede cuando lo miramos. La esencia de la teoría de Rich es que un “programador” del futuro diseñó nuestra realidad para simular el curso de lo que el programador considera historia antigua, por la razón que sea, tal vez porque está aburrido.
Rich dice que nuestro universo está pixelado en unidades (dividido en pedazos como partículas subatómicas)
Hay muchas pruebas que indican que nuestra realidad no es tan real como nos parece a algunos de nosotros. Esto puede ser el resultado de simulaciones por computadora en las que todos estamos inmersos. Por supuesto, la pregunta principal que debe hacerse en una situación así es “¿quién creó esta simulación?” Entre las posibles soluciones está Dios o alguna civilización extraterrestre avanzada.Rich define la ciencia como el descubrimiento del marco matemático que explica nuestras observaciones del mundo físico.
Destaca que el universo es asombrosamente matemático, es decir, que puede describirse y comprenderse mediante leyes y principios matemáticos. Esto no es una condición necesaria, pero es un aspecto fundamental de nuestro universo.
Cita a Einstein, a quien le parecía incomprensible que el mundo fuera comprensible. También hace referencia al tratado de Eugene Wigner sobre la “irrazonable eficacia de las matemáticas en el mundo natural”, que describe este fenómeno como un “milagro” o un “regalo”.
Dice que el universo entero, incluidas las constantes físicas, se puede describir en unas cuantas hojas de papel.
– Esto permite simular el universo en una computadora más pequeña que el universo mismo.
– El universo está “pixelado”, lo que significa que tiene un número finito de elementos (longitud de Planck) y no se puede dividir más.
– Todos los aspectos del universo (longitud, masa, energía, tiempo, volumen) son finitos y discretos.
– El universo tiene un número finito de estados, lo que lo hace computable.
Rich Terrile afirma: “Incluso las cosas que consideramos continuas (tiempo, energía, espacio, volumen) tienen un límite finito en cuanto a su tamaño. Si ese es el caso, entonces nuestro universo es computable y finito. Esas propiedades permiten simular el universo”.
¡Rich dice que puede construir un DIOS!
Señala que la mayoría de los científicos no se basan en la fe, ya que el marco matemático del universo no deja lugar para la magia, la fe o los milagros. En cambio, la ciencia ofrece una realidad más asombrosa.Rich analiza lo que se necesita para ser ateo, empezando por una teoría del origen independiente de un creador. La ciencia ofrece la teoría del Big Bang, aunque tiene algunas probabilidades improbables y epiciclos. Menciona el concepto de cerebros de Boltzmann, que podrían formarse con más frecuencia que un universo entero. A pesar de algunos problemas con la teoría, la ciencia tiene una buena historia del origen.
Para ser ateo, también hay que creer que Dios no existe. Rich no puede demostrar nada negativo, pero da la vuelta a la perspectiva: ¿puede demostrar que Dios puede existir dentro de las leyes de la ciencia, sin milagros ni magia? La respuesta es sí, debido a la naturaleza matemática del universo. Rich puede simular un universo, creando un escenario en el que cumple los requisitos de Dios tal como se describen en el Catecismo de Baltimore. Como programador, puede crear una simulación con autoconciencia artificial, convirtiéndose esencialmente en el creador de un universo.
Rich cree que estas tres áreas clave: computación avanzada, inteligencia artificial y realidad virtual, pueden unirse para dar a los humanos un poder divino sobre la mente y la materia, permitiéndonos crear y diseñar nuestros propios universos.
“En este momento, las supercomputadoras más rápidas de la NASA funcionan a una velocidad que duplica la del cerebro humano. Si se hace un cálculo simple utilizando la Ley de Moore, se descubrirá que, en el plazo de una década, estas supercomputadoras tendrán la capacidad de calcular toda la vida humana de 80 años, incluidos todos los pensamientos concebidos durante esa vida, en el lapso de un mes”, afirmó Rich.
¿Cómo podemos determinar si nuestra realidad podría ser una simulación por computadora?
El científico de la NASA Richard Terrile, quien casualmente fue asesor técnico en “Terminator 3: Rise of the Machines” y pasa sus días tratando de desarrollar inteligencia artificial, cree que la IA podría eventualmente solucionar todo, desde terminar con el hambre en el mundo hasta curar el cáncer.“Creo que sí”, afirma. “Creo que estos sistemas de información tan avanzados, que van mucho más allá de las capacidades de un ser humano, son la manera de resolver estos problemas”.
A menos que creas que hay algo mágico en la conciencia (y yo no lo creo, creo que es el producto de una arquitectura muy sofisticada dentro del cerebro humano), entonces tienes que asumir que en algún momento se puede simular mediante un ordenador o, en otras palabras, se puede replicar. Hay dos formas de lograr un cerebro humano artificial en el futuro. Una de ellas es mediante ingeniería inversa, pero creo que sería mucho más fácil desarrollar un circuito o una arquitectura que pudiera volverse consciente. Tal vez en los próximos diez a treinta años podamos incorporar la conciencia artificial a nuestras máquinas.
Ahora prepárense: en 30 años esperamos que una PlayStation (sale una nueva PlayStation cada seis u ocho años, por lo que esta sería una PlayStation 7) sea capaz de calcular aproximadamente 10.000 vidas humanas simultáneamente en tiempo real, o aproximadamente una vida humana en una hora.
¿Cuántas PlayStations hay en todo el mundo? Más de 100 millones, sin duda. Pensemos en 100 millones de consolas, cada una de ellas con 10.000 humanos. Eso significa que, para entonces, conceptualmente, podría haber más humanos viviendo en PlayStations que humanos viviendo en la Tierra hoy.
¿Existe entonces la posibilidad de que estemos viviendo en un juego super avanzado en la PlayStation de algún fulastre con los ojos inyectados en sangre? Rich dijo: “Sí”.
Rich: Puedo crear Conciencia
Rich continúa explorando la naturaleza de la conciencia y si es algo espiritual o mágico. Como científico, basa sus ideas en la ciencia más que en la fe. Sugiere que la conciencia probablemente proviene de las conexiones complejas de nuestro cerebro más que de una fuente mística.En la actualidad, existen dos enfoques principales para comprender y replicar la conciencia. Uno de ellos consiste en aplicar ingeniería inversa al cerebro, intentando trazar y comprender su intrincado funcionamiento. Otro enfoque, que utiliza el laboratorio de Rich, consiste en desarrollar redes neuronales artificiales mediante variaciones y selecciones aleatorias para ver si pueden imitar la autoconciencia del cerebro.
En 2015, Rich estimó que podrían pasar entre 10 y 30 años hasta que se lograra la conciencia artificial. Luego pasó a hablar de la realidad virtual y sus aspectos matemáticos. Si dos cosas son matemáticamente indistinguibles, se consideran lo mismo. Esto lo lleva a preguntarse si un entorno perfectamente simulado es lo mismo que el real. Si un mundo simulado puede replicar perfectamente las experiencias sensoriales del mundo real, entonces, en teoría, los mundos real y simulado podrían ser idénticos.
Rich propuso un experimento mental en el que, si encerráramos todo nuestro cuerpo y sustituyéramos las entradas sensoriales por una simulación perfectamente realista, tendríamos que preguntarnos si el mundo real y el mundo simulado serían indistinguibles. Si la simulación pudiera recrear todas las experiencias sensoriales con exactitud, podría ser tan real como el mundo real.
Especuló sobre la posibilidad de cargar nuestra conciencia en computadoras. En tal escenario, no necesitaríamos cuerpos físicos ni cerebros, solo mentes interactuando con una máquina capaz de simular la realidad. Esta realidad simulada podría, teóricamente, manipular el tiempo y las probabilidades, creando cualquier tipo de universo o escenario imaginable.
¿Cuales son los requisitos para ser creador?
Rich considera diferentes ideas sobre el origen del universo. Para las personas que no creen en un creador divino, la teoría del Big Bang explica cómo se originó el universo. Pero Rich piensa en lo que se necesitaría para que existiera un creador dentro de nuestro universo y cómo ese creador podría controlar y cambiar el universo, de manera similar a cómo se puede controlar un mundo de juego en “Los Sims”. Él cree que con la tecnología del futuro, podría ser posible crear simulaciones con seres conscientes, de manera similar a cómo un creador podría trabajar con un universo simulado.Después de pensarlo, me di cuenta de que un creador de un universo es capaz de cambiar las leyes de la física y esculpir lo que sea que ese universo sea, lo cual puedo hacer en una simulación por computadora. De hecho, tal vez pueda hacerlo pronto con seres conscientes.
Tal vez, o tal vez simplemente los dejaría ir. Vivirían el resto de sus vidas en un período de tiempo increíblemente corto. Tal vez podría cambiar las leyes físicas. Podría hacer que vivieran en lugares tanto hospitalarios como inhóspitos. Podría hacer que estuvieran completamente solos. Tal vez esa sea una condición límite para nosotros y explique por qué no hay extraterrestres.
Daros cuenta que vivimos en el concepto de LA PARTÍCULA DE DIOS... y vivimos en la molécula de la vida: La energía, es la única existencia real... Pero necesitamos recrear su irrealidad, el concepto de metaverso, para poder existir en tan in habitable, habita... Motivo de compartir el comentario. Al pensar que la partícula, es la existencia, no hemos comprendido la anti simetría, plausible, que EL UNIVERSO, ha logrado programar, pero sin inteligencia artificial, aliens ni Dios. Dios es el que ha razonado toda la comprensión de lo qué es EL UNIVERSO. Y el propio UNIVERSO, ha programado, con el ente de EL PENSAMIENTO, la fuerza impulsiva de la energía para superarse en su naturaleza dispersa e in animada, lograr destruir y a la vez tras*formar su naturaleza. Esta metafísica es la más coherente con lo que tangiblemente podemos ver y percibir... Y la física cuántica es su hecho... Veremos.
