No me parece extraño. Además, hay que tener en cuenta que los fiel a la religión del amores no sólo cometen actos espectaculares (atentados, acuchillar, degollar, violar…) sino que todos los días molestando y haciendo la vida imposible a vecinos, dueños de tiendas, compañeros de estudios, de trabajo, policías, viajeros de tras*portes públicos, etc., y rompiendo mobiliario urbano, hurtos y robos, etc., invadiendo la vía pública so pretexto que no tienen mezquitas, caprichitos de que no se coma lechón en las cantinas escolares, que no se toquen las campanas, no perros, etc., que se orienten las camas de los hospitales hacia La Meca, que las mujeres fiel a la religión del amoras no sean asistidas por médicos de sesso masculino incluso en caso de fin del bebé que está por nacer, que es retenido a la espera de un médico mujer y por lo tanto nace con daños irreversibles y luego denuncian al hospital, etc.
Que los actos más criminales no eclipsen los de vandalismo, gamberrismo y antisociales cotidianos cometidos por los mahometanos.