Es absurdo aplicar el reduccionismo de “las mujeres son malas” o “los hombres son malos”.
En grupos sociales inseguros (inmaduros) es habitual ver cómo a los individuos más vulnerables se les hostiga por simple “sensación de control y poder” de los malotes que son, por cierto, igual o más inseguros que los betas.
El mundo está lleno de hombres y mujeres betas que se emparejan entre sí. Lo que no suele funcionar a largo plazo son parejas donde uno sea beta y el otro no porque se producirán roles de poder y escarnio contra el débil. Llamar a puertas que nos quedan muy altas o muy bajas, no suele ser una opción sensata para nadie.
En grupos sociales inseguros (inmaduros) es habitual ver cómo a los individuos más vulnerables se les hostiga por simple “sensación de control y poder” de los malotes que son, por cierto, igual o más inseguros que los betas.
El mundo está lleno de hombres y mujeres betas que se emparejan entre sí. Lo que no suele funcionar a largo plazo son parejas donde uno sea beta y el otro no porque se producirán roles de poder y escarnio contra el débil. Llamar a puertas que nos quedan muy altas o muy bajas, no suele ser una opción sensata para nadie.