Un combatiente español en busca y captura en Ucrania: "Yo he venido a luchar, no a suicidarme". La Defensa Territorial ucraniana no le deja romper contrato, a pesar de que está en su derecho a renunciar, y lleva tres meses sin sueldo y sin soluciones.
La Defensa Territorial ucraniana no le deja romper contrato, a pesar de que está en suderecho a renunciar, y lleva tres meses sin sueldo y sin soluciones.
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"No es necesario que lo busquen, ni mucho menos que lo capturen, ya que Nacho, que así se llama este alicantino, está perfectamente localizado y viviendo en paupérrimas condiciones en el camping acondicionado para tal efecto, sin agua potable y comiendo comida caducada, donde la brigada 241 lo trasladó hace unas semanas."
La imagen de Nacho es desoladora y una muestra del engaño al que los otanejos someten a estos pobres simples, los cuales tras su llegada a Ucrania son cálidamente recibidos por la artillería rusa. El temor se apodera de su estancia ante la amenaza constante de la dronería, amén de cientos de bombas fab aderezadas con módulos de planeo cayendo a diario sobre sus cabezas.
No imaginaban encontrarse en Ucrania con un escenario tan dantesco donde las tropas ucranianas caen como moscas y son masacradas, en ocasiones tras realizar maniobras completamente absurdas y suicidas ordenadas por sus mandos.
