Mis fracasos en Tinder. Capítulo I

Senusert° dijo:

Esta historia me recuerda muchísimo a una que tuve yo hace algunos años. Hasta el detalle de los condones, en el que te entiendo perfectamente porque sentí lo mismo que tú: que usarlos ella para acostarse con otro es una de las últimas faltas de respeto que se pueden tener.

Al hilo de ello, y porque me has recordado a mi antiguo yo, te dejo unas cuantas notas, por si te pueden servir. Que por ahí ya pasamos otros mucho antes.

1. Se encuentra el espejo de cómo se encuentra uno en ese momento. Si por lo que sea tienes algún conflicto interno vas a funcionar como un faro que atraerá a mujeres con pedrada. A tu edad de no demasiado peso, pero en aumento constante. Para poder encontrar a una que merezca la pena (las hay. No hagas caso de la gente que arrastre frustración con ese tema, porque su opinión no es objetiva ni te va a servir) tiene uno que emitir en otra frecuencia. La necesidad, la falta de autoestima, la prisa (con 24 años, ninguna has de tener), la misoginia o el platonismo te van a llevar, inevitablemente, a pelandruscas como la que has encontrado esta vez.

100% comprobado y si quieres hacemos la prueba: haz obras por dentro y empezarán a llegar las mujeres interesantes.

2. Ésta que has encontrado ahora, por la edad, está en fase carruselera. Ha debido dejar al novio de la primera juventud y está en esa fase en la que quiere disfrutar. Punto. No hay más. Lo que pasa es que además es insegura, porque busca perfiles como el tuyo, de gente que quiera algo más, porque entonces no corre el riesgo de que le hagan, llegado el caso, lo mismo que está haciendo ella.

Debe de tener una agenda de las de cita previa y secretaria más dedicada que la de Mocedades, y además ha conocido a otro/a recientemente. Por eso al principio contestaba esporádicamente y ahora ya no lo hace. Si insistes buscará casus belli para liártela. Es mejor no seguir este camino. Se nota enseguida cuándo hay más gallos en el gallinero. Si ella sólo quiere quedar para acostarse contigo y no quiere salir a tomar una cerveza o a hacer algo social, malo: está quedando con otros. Y tampoco para tomar cerveza.

3. Esas páginas son un zoco cárnico en donde no vas a encontrar nada bueno. Las chicas que merecen la pena no necesitan tinder. Y además las encontrarás sin tener que ir a buscarlas. Lo demás es como el Museo de los Horrores: tías con muchísimo material de arrastre, mamis en busca de pardillo que lleve a sus larvas al cole en el Tucson, cadáveres emocionales necesitadas de aumentar r su caché siendo atendidas simultáneamente por varios hombres, scorts encubiertas a la caza del pringado de turno, etc. Algunas incluso van armadas y no lo dicen.
No te interesa para nada ese mundo. Y menos a tu edad.

4. LO MÁS IMPORTANTE: NO TE ARRASTRES. Ninguna mujer se merece eso. No pierdas la dignidad, ni la compostura. La vida es difícil: nos van a engañar, o a usar, pero cuanta más dignidad muestres ante los embates más cerca estarás de ser quien quieres ser, y estar acompañado por una señora de verdad, y no pencos como ésta.

Hay más oferta que demanda. Hay que asumirlo. Habrá hombres que no puedan tener una relación, ni larga ni corta, con una mujer. No creo que sea tu caso. El tuyo es encontrar una que merezca la pena, y para eso tienes que estar fuera del paradigma de hombre de juguete actual. Gente como Jordan Peterson lo explican a la perfección.

Si tú cambias, tu realidad cambia, y subproductos como está mujer serán invisibles para ti. Te lo aseguro

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