Katzen
Himbersor
- Desde
- 9 May 2017
- Mensajes
- 1.020
- Reputación
- 1.937
Copio y pego :
A petición de nuestro ilustre amigo XKRAZOTE, y continuando un tema iniciado en el hilo de "Como cargarse un portaaviones", paso a tras*cribiros un artículo publicado en la revista Fuerza Aerea Clásica nº 2, bajo el Titulo "Recuerdos de Manises". Después de glosar el paso de los F86 Sabre por dicha base, le llega el turno a las "planchetas" (Mirage III) bajo el subtitulo "Mirage III: un cazador sin complejos" un piloto de Mirage III del Ala 11, Escuadron 111 nos cuenta su hazaña. Ahí va:
POOP DECK 92: José Miguel Díaz y Quintana.
En mayo de 1992 participábamos en un Poop Deck. Se trataba de un ejercicio contra la VI Flota de los EEUU, en el que volaríamos sobre todo misiones de ataque a las unidades de superficie. Además estaban los ataques aire-aire disimilares, contra F18 y F14, misiones mucho más atractivas y que a todos nos apetecían mucho más. Combatir contra un avión muy superior era “lo de siempre” para un piloto de Mirage III en el 92.
Contra el F14 no teníamos experiencia alguna, ya que la mayor parte de nosotros éramos recién llegados a la Unidad (yo todavía no llevaba un año y acababa de completar mi Plan de Instrucción), Los estudios de maniobrabilidad de que disponíamos, por más que mirábamos de arriba abajo, no dejaban apenas un resquicio donde nuestro avión pudiese arañar alguna ventaja.
Hubo un primer enganche, un 2 contra 2, con un resultado no muy bueno. Como una sola misión no es suficiente para sacar conclusiones todos esperábamos ser los próximos en estar en la pizarra de Operaciones programados para el siguiente DACT, para ver de cerca de alguno de esos pájaros, a ser posible a través del visor.
Mi enfrentamiento tuvo lugar de una forma totalmente inesperada: volando un CAP de defensa aérea, fuimos acometidos hacia el sur, cuando, en mitad del acometimiento, nuestro controlador nos reacometió en dirección este. Era un acometimiento a corta distancia, sin tiempo para establecer la mejor geometría de interceptación, así que nos pusimos en posición defensiva separados aproximadamente una milla y media, mi punto hacia el norte y más alto. Aunque no teníamos contacto con la traza, los alertadores no sonaban, lo cual era buena señal.
EL COMBATE
De repente, de en medio de la formación salió un Tomcat, tirando a la vertical, con rumbo opuesto. Inmediatamente aparecieron otros dos, al norte, a unas tres millas virando hacia nosotros.
Mandé virar fuerte a la izquierda a mi punto, mientras que mantenía a la vista al primer F14, que cruzaba ahora nuestra altura para virar derecha. Aparentemente no me había visto, y se empeñaba en presionar al otro, así que ceñí todo lo que pude, viendo que en ese momento los otros dos empezaban a virar hacia nosotros. Entonces mi punto estuvo “tally” con ellos.
El que tiraba a la vertical era el que nos podría dar problemas. En cuanto a los otros dos, parecían ajenos a lo que estaba pasando. En una especie de formación de ala, separados por menos de 2000 pies, viraban pacíficamente a la izquierda con las alas totalmente desplegadas (¿?). Eso último me descolocó un poco pues deberían entrar a alta velocidad, con las alas totalmente en flecha. Mi punto recortó rápidamente por el interior de su viraje. Entonces, el de arriba comenzó a bajar el morro, prediciéndole claramente, en el momento que iba a disparar sobre el más demorado, dándome la panza.
DERRIBADOS
Tiré fuerte hacia él. Seguía sin verme y se estaba encelando con mi compañero, aunque no llegó a tiempo de evitar que disparase sobre uno de los dos F14 del norte. Oí el tono de mi Sidewinder y apreté el botón. En poco más de 20 segundos habíamos hecho dos disparos.
El tercer F14 comenzó a virar como un condenado, y nos cruzamos con él prácticamente cara a cara, a nuestra izquierda, con mucho ángulo como para poder intentar dispararle o quedarnos. Era el momento de salir corriendo, ya que además, era muye extraño que apareciesen solo tres. Por alguna parte debía estar el cuarto, quizás disparándonos de forma inadvertida, pero por más que buscaba a mi alrededor, no veía ninguno más.
Descargamos con postquemador máximo. Con medio G negativo, la velocidad aumentaba rápidamente, hasta 0.98, el máximo permitido, aunque con ganas me hubiera puesto supersónico para salir corriendo de allí.
Nos colocamos a la defensiva otra vez, aunque ahora con los ojos más abiertos, y nos dejamos la vista mirando hacia atrás buscando un punto, una estela, una mancha de humo, lo que fuera (“Es mejor ver un caza a tus seis que no ver ninguno”). Los alertadores seguían en silencio. Bajamos hasta la altitud mínima, a fin de reducir el alcance máximo de sus armas.
Vimos una raya de color de humo, a unas dos millas, y mandé un “cruzado” virando cada uno hacia el otro, sin cruzarnos a la misma altura, para evitar que nos tuviese a ambos a la vista. Se quedó con mi compañero, que viraba hacia la derecha, hacia el este. Yo continué mi viraje ascendiente a la izquierda, para evitar que nos pudiese ver a los dos.
Antes de que hubiesen completado una vuelta completa, conseguía hacer una entrada por la panza al último F14.
De vuelta a casa, apenas podíamos creer lo que nos había pasado. Habíamos derribado a tres F14 aparentemente sin recibir un solo disparo. Nos quedaba, sin embargo, un regustillo extraño, que no nos gustaba nada. Había sido demasiado fácil.
En cualquier caso, lo peor de todo era que nuestros registradores de visor no llevaban película, y no habíamos podido inmortalizar a nuestros adversarios. Una foto de un F14 encuadrado en el visor era una evidencia “dura” a la hora de contarlo y hubiera quedado muy bien en nuestra sala de briefing...”
Mirage III españoles zurrando F14 US Navy Poop Deck 92 - Armas.es foro de tiro, caza, policial, militar y compra-venta
A petición de nuestro ilustre amigo XKRAZOTE, y continuando un tema iniciado en el hilo de "Como cargarse un portaaviones", paso a tras*cribiros un artículo publicado en la revista Fuerza Aerea Clásica nº 2, bajo el Titulo "Recuerdos de Manises". Después de glosar el paso de los F86 Sabre por dicha base, le llega el turno a las "planchetas" (Mirage III) bajo el subtitulo "Mirage III: un cazador sin complejos" un piloto de Mirage III del Ala 11, Escuadron 111 nos cuenta su hazaña. Ahí va:
POOP DECK 92: José Miguel Díaz y Quintana.
En mayo de 1992 participábamos en un Poop Deck. Se trataba de un ejercicio contra la VI Flota de los EEUU, en el que volaríamos sobre todo misiones de ataque a las unidades de superficie. Además estaban los ataques aire-aire disimilares, contra F18 y F14, misiones mucho más atractivas y que a todos nos apetecían mucho más. Combatir contra un avión muy superior era “lo de siempre” para un piloto de Mirage III en el 92.
Contra el F14 no teníamos experiencia alguna, ya que la mayor parte de nosotros éramos recién llegados a la Unidad (yo todavía no llevaba un año y acababa de completar mi Plan de Instrucción), Los estudios de maniobrabilidad de que disponíamos, por más que mirábamos de arriba abajo, no dejaban apenas un resquicio donde nuestro avión pudiese arañar alguna ventaja.
Hubo un primer enganche, un 2 contra 2, con un resultado no muy bueno. Como una sola misión no es suficiente para sacar conclusiones todos esperábamos ser los próximos en estar en la pizarra de Operaciones programados para el siguiente DACT, para ver de cerca de alguno de esos pájaros, a ser posible a través del visor.
Mi enfrentamiento tuvo lugar de una forma totalmente inesperada: volando un CAP de defensa aérea, fuimos acometidos hacia el sur, cuando, en mitad del acometimiento, nuestro controlador nos reacometió en dirección este. Era un acometimiento a corta distancia, sin tiempo para establecer la mejor geometría de interceptación, así que nos pusimos en posición defensiva separados aproximadamente una milla y media, mi punto hacia el norte y más alto. Aunque no teníamos contacto con la traza, los alertadores no sonaban, lo cual era buena señal.
EL COMBATE
De repente, de en medio de la formación salió un Tomcat, tirando a la vertical, con rumbo opuesto. Inmediatamente aparecieron otros dos, al norte, a unas tres millas virando hacia nosotros.
Mandé virar fuerte a la izquierda a mi punto, mientras que mantenía a la vista al primer F14, que cruzaba ahora nuestra altura para virar derecha. Aparentemente no me había visto, y se empeñaba en presionar al otro, así que ceñí todo lo que pude, viendo que en ese momento los otros dos empezaban a virar hacia nosotros. Entonces mi punto estuvo “tally” con ellos.
El que tiraba a la vertical era el que nos podría dar problemas. En cuanto a los otros dos, parecían ajenos a lo que estaba pasando. En una especie de formación de ala, separados por menos de 2000 pies, viraban pacíficamente a la izquierda con las alas totalmente desplegadas (¿?). Eso último me descolocó un poco pues deberían entrar a alta velocidad, con las alas totalmente en flecha. Mi punto recortó rápidamente por el interior de su viraje. Entonces, el de arriba comenzó a bajar el morro, prediciéndole claramente, en el momento que iba a disparar sobre el más demorado, dándome la panza.
DERRIBADOS
Tiré fuerte hacia él. Seguía sin verme y se estaba encelando con mi compañero, aunque no llegó a tiempo de evitar que disparase sobre uno de los dos F14 del norte. Oí el tono de mi Sidewinder y apreté el botón. En poco más de 20 segundos habíamos hecho dos disparos.
El tercer F14 comenzó a virar como un condenado, y nos cruzamos con él prácticamente cara a cara, a nuestra izquierda, con mucho ángulo como para poder intentar dispararle o quedarnos. Era el momento de salir corriendo, ya que además, era muye extraño que apareciesen solo tres. Por alguna parte debía estar el cuarto, quizás disparándonos de forma inadvertida, pero por más que buscaba a mi alrededor, no veía ninguno más.
Descargamos con postquemador máximo. Con medio G negativo, la velocidad aumentaba rápidamente, hasta 0.98, el máximo permitido, aunque con ganas me hubiera puesto supersónico para salir corriendo de allí.
Nos colocamos a la defensiva otra vez, aunque ahora con los ojos más abiertos, y nos dejamos la vista mirando hacia atrás buscando un punto, una estela, una mancha de humo, lo que fuera (“Es mejor ver un caza a tus seis que no ver ninguno”). Los alertadores seguían en silencio. Bajamos hasta la altitud mínima, a fin de reducir el alcance máximo de sus armas.
Vimos una raya de color de humo, a unas dos millas, y mandé un “cruzado” virando cada uno hacia el otro, sin cruzarnos a la misma altura, para evitar que nos tuviese a ambos a la vista. Se quedó con mi compañero, que viraba hacia la derecha, hacia el este. Yo continué mi viraje ascendiente a la izquierda, para evitar que nos pudiese ver a los dos.
Antes de que hubiesen completado una vuelta completa, conseguía hacer una entrada por la panza al último F14.
De vuelta a casa, apenas podíamos creer lo que nos había pasado. Habíamos derribado a tres F14 aparentemente sin recibir un solo disparo. Nos quedaba, sin embargo, un regustillo extraño, que no nos gustaba nada. Había sido demasiado fácil.
En cualquier caso, lo peor de todo era que nuestros registradores de visor no llevaban película, y no habíamos podido inmortalizar a nuestros adversarios. Una foto de un F14 encuadrado en el visor era una evidencia “dura” a la hora de contarlo y hubiera quedado muy bien en nuestra sala de briefing...”
Mirage III españoles zurrando F14 US Navy Poop Deck 92 - Armas.es foro de tiro, caza, policial, militar y compra-venta