Roca Barea tiene varias virtudes, pero una sobresale entre las demás: se explica con una claridad absoluta, todo lo que dice lo argumenta de forma impecable y además sabiendo perfectamente de lo que habla, no como tantos y tantos intelectuales de tertulia, que se leen dos libros sobre un tema y ya se consideran expertos.
Con más personas como ella en puestos de responsabilidad, España aún tendría posibilidades de salvarse, de recuperar el orgullo, la dignidad y hasta la soberanía. Pero me temo que esta mujer es la excepción, por eso destaca tanto, rodeada de cobardes y de mediocres.
