Loco_Ivan
Madmaxista
Y menos mal que no quiere remover más la sarama.
Luis Enrique, en su presentación: "Robert Moreno ha sido desleal"
Luis Enrique, en su presentación: "Robert Moreno ha sido desleal"
El segundo advenimiento de Luis Enrique fue todo un golpe de efecto en Las Rozas, donde el nuevo seleccionador, tantas veces criticado por su hostilidad ante las cámaras, ofreció un perfil muy diferente para despejar muchas de las dudas desencadenas tras el despido de Robert Moreno. "Era la oportunidad de su vida y había trabajado mucho para ello. Entiendo que es un profesional ambicioso, pero para mí es desleal y yo jamás haría eso que hizo. No quiero a nadie con esas características en mi staff, porque la ambición desmedida no es un valor para mí", reveló sobre la decisión de prescindir de su antiguo hombre de confianza.
El "desencuentro" con Moreno, según explicó con detalle el nuevo seleccionador, se produjo el 12 de septiembre, "el único día que tengo contacto con él". Una llamada telefónica y una reunión en casa del asturiano. "Allí me dice que quiere hacer la Eurocopa y que si yo quiero, después sería mi segundo. Lo veía venir por los acontecimientos de las últimas semanas", detalló el ex preparador del Barcelona.
Escoltado por Luis Rubiales y José Francisco Molina, el técnico arrojó la luz que el presidente y el director deportivo no habían podido aportar la semana pasada, horas después de la goleada ante Malta en Madrid. "Quiero que quede bien claro que nunca me he ofrecido a la Federación", subrayó. "Todo cambia a comienzos de octubre tras una llamada de Rubiales y Molina. Nos reunimos en Zaragoza y allí les dije que estaban exentos de cualquier compromiso conmigo. Es allí donde me muestran el interés de que pueda volver", pormenorizó.
El dominio del escenario, tan lejos de otras comparecencias plagadas de nervios, fue norma a lo largo de los más de 45 minutos de Luis Enrique ante la prensa. "Me siento en parte responsable y nada orgulloso del modo en que ha ha terminado esta historia", admitió con ánimo autocrítico.
"No quiero remover más la sarama"
"Necesitaba dar estas explicaciones por mí, por mi familia, por mis amigos, por los jugadores", reveló con pulso firme. A la espera de una futura réplica de Moreno, autor hace cinco días de un discreto comunicado de despedida, Luis Enrique prefiere ahora arrojar tierra sobre el drama. "No quiero remover más la sarama", zanjó.
De su boca no saldría ningún reproche hacia los logros deportivos de su antecesor, aunque sí un veredicto contundente tras ese momento en que todo hizo crack. "No tenía dudas de nuestra relación personal, hasta que las palabras decían una cosa y los hechos otra diferente. No soy el bueno de la película, pero el malo tampoco", reveló.
Aún más delgado que de costumbre, gracias a esa actividad física "que es un arma bestial para seguir en la vida", el flamante seleccionador mostró muchas más sonrisas que de costumbre. "Me siento muy bien anímicamente y muy ilusionado. Para mí esto no se trata de una presentación, sino casi una charla con amigos", deslizó con asombrosa naturalidad.
El gran gazapo
Incluso se permitió alguna broma sobre la opción de conceder al fin entrevistas o sobre su desliz con una llamada a Jesús Navas. Y es que hace unas semanas, el lateral del Sevilla descolgó con sorpresa el teléfono cuando Luis Enrique, en realidad, quería contactar con Jesús Casas, su segundo entrenador a partir de ahora. Casas, hombre de total confianza desde sus labores de scouting en el Barça B, encabezará un staff donde continúan Rafael Pol como preparador físico y Rafael Valdés como psicólogo.
Durante esta enumeración se produjo el gran gazapo de la mañana, cuando Lucho volvió a incluir a Robert Moreno en su equipo técnico como preparador físico. Tras la sonora carcajada de Rubiales, el entrenador recuperó el aplomo para valorar las opciones de su equipo en la Eurocopa. "He hecho un análisis del potencial de nuestros rivales y España es una de las favoritas, sin lugar a dudas". En el mismo nivel, a su juicio, que Francia, Italia, Holanda o Alemania.