A los menores que han entrado ilegalmente en un país, se los entrega el mismo dia en el consulado de su pais de origen para que los repatríe. Si no se los puede identificar, se los entrega al pais por cuyas aguas territoriales ha salido el bote que lo llevaba.
Si no se hace, es por que se ha construído una red clientelar en torno a estas personas que da mucho dinero y paga muchas nóminas.