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Será en Octubre
Los vasitos de arroz, a examen: ¿son realmente saludables?
Aunque sea un alimento que ha sufrido un procesado previo al consumo, este consiste simplemente en una cocción muy similar a la que podemos hacer en casa
Collage de vasitos de arroz.
Por
Fran Sánchez Becerril
19/03/2022 - 05:00
Hace unos años, cuando la palabra 'cobi19' no significaba nada para la mayor parte de la población, una marca se atrevió a lanzar un nuevo producto al mercado: los vasitos de arroz. Rápidamente se popularizaron y con el paso del tiempo aparecieron multitud de variedades, tanto de tipos de arroz como de nuevas empresas que se sumaron al fenómeno.
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Fran Sánchez Becerril
Lo cierto es que los vasitos de arroz son un éxito indudable entre los consumidores por su practicidad, pero ¿son realmente seguros, saludables y recomendables?
“Aunque sea un alimento que ha sufrido un procesado previo al consumo, este consiste simplemente en una cocción muy similar a la que podemos hacer en casa. De manera que es prácticamente igual a prepararlo nosotros en casa”, explica a El Confidencial Iñaki Elío, director del Grado de Nutrición Humana y Dietética de la Universidad Europea del Atlántico.
Un procesado saludable
El nutricionista desarrolla que, en términos generales, son prácticamente igual de saludables que el arroz que cocinamos nosotros, “ya que la mayoría de vasitos como ingredientes solo llevan el arroz, aceite (girasol u oliva), sal y un emulgente”. “Así que, a no ser que se tenga que controlar la ingesta de sal, no habría ningún problema en su consumo”, añade Elío.
Además, el especialista apunta a que cada vez más las marcas ofrecen variedades integrales, de manera que aún sería más saludable, pues nuestra alimentación en términos generales no llega a cubrir la cantidad de fibra recomendada diaria.
Cómo elegir el mejor
La variedad más saludable es la integral, ya que aporta fibra, que como se sabe es beneficiosa para la salud intestinal y cardiovascular. “El resto de variedades tienen una composición muy similar y las principales diferencias son solamente a nivel organoléptico”, agrega.
Foto: iStock.
Fijándonos en el etiquetado, el nutricionista recomienda escoger aquellos que lleven aceite de oliva o que directamente no lleven aceite, “y por último también nos podemos fijar en la cantidad de sal que aportan, que por 100 gramos puede variar de 1 a 0,12 g, siempre siendo preferibles los que tengan un menor contenido de sal”.
La calidad
Respecto a la calidad del producto, la dietista-nutricionista Sandra Sumalla señala a este periódico que la mejor forma de conocerla es “analizando los ingredientes", puesto que así "podemos establecerla en función de si el arroz es integral, si lleva aceite, que este sea de oliva y que aporte la menor cantidad posible de sal”.
Si hablamos de los distintos fabricantes, “más que en la marca, lo importante es fijarse en los ingredientes de cada variedad, ya que la misma marca puede tener productos con diferente calidad nutricional”, apunta Sumalla, que es la decana de Ciencias de la Salud de la Universidad Europea del Atlántico.
Riesgos para la salud
La nutricionista explica que “siempre se deben seguir las instrucciones de preparación y comprobar que todo el producto se ha calentado lo suficiente, de manera que nos aseguremos de que ninguna bacteria pueda sobrevivir y producir una intoxicación alimentaria por el consumo de arroz”.
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Fran Sánchez Becerril
Y subraya que, en caso de guardarlo, debe hacerse en la nevera “y no tardar en consumirlo”.
La nutricionista remarca que los vasitos de arroz son seguros: “Si se siguen las instrucciones de los fabricantes no habría ningún problema, eso sí, como hemos comentado, es importante calentarlos lo suficiente cuando se cocinan y no consumirlos más allá de 48 horas desde que se han abierto, y siempre conservarlos en nevera una vez abiertos, ya que podría desarrollar la bacteria Bacillus cereus (que causa vómitos, diarrea y dolor abdominal)”.
El problema medioambiental
El mayor problema que presenta este producto –si se manipula correctamente– es el medioambiental, ya que se genera un desperdicio de plástico muy grande para el poco tiempo que el arroz se preserva en el vasito. Algo que no ocurre si lo cocinamos en casa y lo guardamos en un táper.
“Es cierto que, a nivel medioambiental, los vasitos de arroz no son la mejor opción, pues generan mucho más residuo que si cocinamos el arroz de manera casera. Aunque las empresas cada vez más ofrecen envases 100% reciclables también en este producto, se deberían utilizar de manera excepcional”, señala a este respecto Sumalla.
Aunque sea un alimento que ha sufrido un procesado previo al consumo, este consiste simplemente en una cocción muy similar a la que podemos hacer en casa
Por
Fran Sánchez Becerril
19/03/2022 - 05:00
Hace unos años, cuando la palabra 'cobi19' no significaba nada para la mayor parte de la población, una marca se atrevió a lanzar un nuevo producto al mercado: los vasitos de arroz. Rápidamente se popularizaron y con el paso del tiempo aparecieron multitud de variedades, tanto de tipos de arroz como de nuevas empresas que se sumaron al fenómeno.
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Fran Sánchez Becerril
Lo cierto es que los vasitos de arroz son un éxito indudable entre los consumidores por su practicidad, pero ¿son realmente seguros, saludables y recomendables?
“Aunque sea un alimento que ha sufrido un procesado previo al consumo, este consiste simplemente en una cocción muy similar a la que podemos hacer en casa. De manera que es prácticamente igual a prepararlo nosotros en casa”, explica a El Confidencial Iñaki Elío, director del Grado de Nutrición Humana y Dietética de la Universidad Europea del Atlántico.
Un procesado saludable
El nutricionista desarrolla que, en términos generales, son prácticamente igual de saludables que el arroz que cocinamos nosotros, “ya que la mayoría de vasitos como ingredientes solo llevan el arroz, aceite (girasol u oliva), sal y un emulgente”. “Así que, a no ser que se tenga que controlar la ingesta de sal, no habría ningún problema en su consumo”, añade Elío.
Además, el especialista apunta a que cada vez más las marcas ofrecen variedades integrales, de manera que aún sería más saludable, pues nuestra alimentación en términos generales no llega a cubrir la cantidad de fibra recomendada diaria.
Cómo elegir el mejor
La variedad más saludable es la integral, ya que aporta fibra, que como se sabe es beneficiosa para la salud intestinal y cardiovascular. “El resto de variedades tienen una composición muy similar y las principales diferencias son solamente a nivel organoléptico”, agrega.
Foto: iStock.
Fijándonos en el etiquetado, el nutricionista recomienda escoger aquellos que lleven aceite de oliva o que directamente no lleven aceite, “y por último también nos podemos fijar en la cantidad de sal que aportan, que por 100 gramos puede variar de 1 a 0,12 g, siempre siendo preferibles los que tengan un menor contenido de sal”.
La calidad
Respecto a la calidad del producto, la dietista-nutricionista Sandra Sumalla señala a este periódico que la mejor forma de conocerla es “analizando los ingredientes", puesto que así "podemos establecerla en función de si el arroz es integral, si lleva aceite, que este sea de oliva y que aporte la menor cantidad posible de sal”.
Si hablamos de los distintos fabricantes, “más que en la marca, lo importante es fijarse en los ingredientes de cada variedad, ya que la misma marca puede tener productos con diferente calidad nutricional”, apunta Sumalla, que es la decana de Ciencias de la Salud de la Universidad Europea del Atlántico.
Riesgos para la salud
La nutricionista explica que “siempre se deben seguir las instrucciones de preparación y comprobar que todo el producto se ha calentado lo suficiente, de manera que nos aseguremos de que ninguna bacteria pueda sobrevivir y producir una intoxicación alimentaria por el consumo de arroz”.
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Fran Sánchez Becerril
Y subraya que, en caso de guardarlo, debe hacerse en la nevera “y no tardar en consumirlo”.
La nutricionista remarca que los vasitos de arroz son seguros: “Si se siguen las instrucciones de los fabricantes no habría ningún problema, eso sí, como hemos comentado, es importante calentarlos lo suficiente cuando se cocinan y no consumirlos más allá de 48 horas desde que se han abierto, y siempre conservarlos en nevera una vez abiertos, ya que podría desarrollar la bacteria Bacillus cereus (que causa vómitos, diarrea y dolor abdominal)”.
El problema medioambiental
El mayor problema que presenta este producto –si se manipula correctamente– es el medioambiental, ya que se genera un desperdicio de plástico muy grande para el poco tiempo que el arroz se preserva en el vasito. Algo que no ocurre si lo cocinamos en casa y lo guardamos en un táper.
“Es cierto que, a nivel medioambiental, los vasitos de arroz no son la mejor opción, pues generan mucho más residuo que si cocinamos el arroz de manera casera. Aunque las empresas cada vez más ofrecen envases 100% reciclables también en este producto, se deberían utilizar de manera excepcional”, señala a este respecto Sumalla.