¿Los que no tenemos ni un tatuaje somos los nuevos revolucionarios y anti sistemas?

Todavia no. El sistema quiere que nos marquemos.
Entre la población española, el porcentaje asciende a entre un 15 y un 20% y, si solo se tiene en cuenta a los ciudadanos de entre 16 y 35 años, el porcentaje alcanza el 40%
 
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Los tatuajes son la marca del ignorancia por excelencia, propio de fulastres sin personalidad afectos a cualquier moda que pueda salir. Hace 30 años los tatuajes eran una rareza, y si estos mismos besugos hubieran vivido en esa época tampoco los hubieran llevado. Además de la indigencia mental que llevan aparejada, también son peligrosos, como bien se sabe, por introducir tinta con productos tóxicos que pueden terminar en el torrente sanguíneo.

Además, no le encuentro la gracia a hacerse dibujitos bajo la piel, que según estos sujetos que los llevan siempre "tienen un significado", que son básicamente gilipishas y demorados. Seguramente estos también fueron a pincharse el mejunje plandémico y son votantes acérrimos de alguna facción del R78.
 
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