Sr. del Cojon
SOCIAL-PAGAFANTAS.
Bah. Ni siquiera hace falta arrepentimiento. Sólo miedo al infierno.Todo pecador que se arrepiente de corazón y acude al Sacramento de la reconciliación (se confiesa) con el firme propósito de no pecar más, no solo se salva, sino que Dios lo cuenta entre sus favoritos. Donde abundó el pecadóo sobreabundó la Gracia. Jesus se rodeaba de pecadores, publicanos, cortesanas...vino a salvar almas no a premiar a fariseos.
Desgraciadamente muchos cristianos, sobre todo católicos, hoy en día se comportan y se han estado comportando durante siglos como fariseos, sepulcros blanqueados, hipócritas, que en mi caso y probablemente en el caso de muchos de los que lean esto es la razón por la que yo me mantuve alejado De la Iglesia la mayor parte de mi vida. Hasta que me dí cuenta de que la Iglesia no es un club de santos, sino un hospital de pecadores, de personas imperfectas que necesitamos de los Sacramentos y de la Gracia para que Dios se apiade de nosotros y nos salve del infierno porque es así de Misericordioso.
Así que en el cielo es posible que haya clientes arrepentidos. El cliente no obstante por definición, es recalcitrante en su pecado, así que no vale estar toda la vida yéndose de pilinguis y cuando te da el jamacuco arrepentirte en plan supersticioso. Si te has ido alguna vez de pilinguis, te has arrepentido, te has confesado y has intentado con todas tus fuerzas no volver más, Dios tendrá Misericordia contigo.
Esta gente lleva 2000 años manejando el miedo atavico al más allá.