fausal
Madmaxista
1. YARASA ADAM: ''BETMEN''
1973
Bien, deduzco que con este título y el cartel ya imaginaréis por dónde van los tiros... ¡nos enfrentamos al Batman turco!
Vestido en plan trapecista y recorriendo la península de Anatolia en su coche destartalado, Batman acaba con los villanos sin necesidad de gadgets de último modelo, ¡ni siquiera de capa! Las escenas de lucha son cutres hasta decir ¡ya basta! y lo mejor de todo es que el superhéroe ¡es un salido de tomo y lomo! que se ''beneficia'' a las chicas que rescata. ¡Y sin su consentimiento para más inri!
2. DARNA
2005
Ladies & Gentlemen les presento a la gran superheroína del cómic y el cine filipino: ¡Darna! la protectora de la Tierra en su lucha constante contra Valentina, la Diosa Serpiente.
Si no conocéis ninguna de las aventuras de esta moza, os aseguro que vuestros ojos no podrán creer lo que están viendo.
Las historias de Darna no hay por donde cogerlas. A medio camino entre el pop y la estética psicodélica, sus películas son toda una experiencia paranormal. Los superpoderes de la chica no están nada claros, ya que van cambiando de una película a otra. Lo único que puedo asegurar es que suelta unas "leches de cuidado". ¡Algo es algo!
Su némesis, Valentina, no le va a la zaga. Sí la veis comprobaréis el porque se dice que los filipinos hacen las peores películas del mundo.
3. SUPER INFRAMAN
1975
Con semejante nombrecito, ¡mal empieza la cosa!
Se sobreentiende que un superhéroe tiene que ser ''super'' en todo, ¿no? Entonces, ¿a qué viene bautizarlo con el nombre de ''infra''?, sufijo que denota inferioridad en todos los aspectos. Si encima le añadimos el aspecto que luce el protagonista, un@ ya se imagina por donde van los tiros.
¡Esta película ''made in Hong Kong'' es mala con avaricia! Pero de tan mala, tan mala que es, acaba resultando divertida. ¡La película no tiene desperdicio! El héroe de pacotilla se enfrenta a un ejército de invasores liderado por unas sexys extraterrestres con aspectos de chinas macizas en bikinis metálicos y con cascos con cuernos incluídos (posiblemente para denotar su procedencia alienígena), y que encabezan un ejército de monstruos con forma de zurullos de plexiglas. ¡El espectáculo hay que verlo para creerlo!
Para acabar, ¡la frase final! cuando un niño le pregunta a su padre: ''Papá, ¿crees que los monstruos volverán algún día?'' A lo que su progenitor responde: ''Mientras Super Inframan esté con nosotros, la Tierra estará tranquila''. La Tierra tal vez, pero ¿nosotros? no se qué decirles.
4. LA MUJER MURCIÉLAGO
1968
Esta superheroína mexicana es mitad detective y mitad luchadora de Pressing Catch... ¡es como El Santo pero en femenino!
Su protagonista tiene que investigar los extraños asesinatos que se están cebando sobre los mejores atletas de lucha libre de Acapulco. Detrás de los crímenes está un científico loco (con su correspondiente ayudante llamado, como no, ''Igor'') que surca los mares en su barco: el Reptilicus, y, donde lleva a cabo turbios experimentos con la finalidad de crear una raza híbrida de Hombres-Pez y así dominar todos los mares conocidos. La base de sus experimentos es la extracción de la glándula pineal humana, que al ser tras*ferida a un pez convierte a este en un híbrido de casi dos metros en pocos segundos (¡milagros de la ciencia moderna!). Destaca además la costrosa pelea en una plaza de toros con becerro incluído, y el cuerpazo de la protagonista, la modelo Maura Mori que, para que negarlo, estaba bien ''jamona''.
5. EL RETORNO DE SUPERMAN
1979
Pobrecitos los turcos, que tenían un régimen ''tan perverso'' que no les permitía ver películas extranjeras y se tenían que tragar sus horrendas y casposas versiones de bajísimo presupuesto que se pasaban los derechos de autor por el forro de los cojo... ¡hay que ser cruel!
La película en sí, es cutre de narices. Tan cutre que provoca la carcajada. El pobre Clark Kent (que es quien ilustra esta lista) con unas gafas de ojo ciego de botella de champagne y unas bolas de navidad como planetas. También el que probablemente sea el primer screener de la historia del cine: un muñeco de Superman colgado de un hilo frente una pantalla con un vídeo de paisajes. ¡Así, Superman "volaba"! La B.S.O. totalmente ''prestada" de otras peliculas (como por ejemplo, el tema de James Bond) e incluyendo el archiconocido tema de John Williams.
Para aquell@s que se atrevan a verla... ¡afortunadamente sólo dura 67 minutos!
6. SPIDERMAN: EL DESAFÍO DEL DRAGÓN
1979
Mucho antes de que Sam Raimi se decidiera a rodar la primera película de su espectacular serie sobre el Hombre Araña, los de Hong Kong ya habían profanado el nombre y la imagen de tan mítico superhéroe.
Olvidaros de las telarañas y de las ''aventuras asombrosas''; este Spiderman, medio yanqui, medio chino, es un tebeo de baratillo con trama de saldo en el que el único poder del superhéroe es su habilidad en las artes marciales. Así que Spiderman se parece al primo de Bruce Lee vestido con un disfraz de carnaval, mientras se da de palos por las calles de la por entonces colonia británica, con diversos maestros del Kung Fu.
Incomprensiblemente, este pedazo de bodrio protagonizado por Nicholas Hammond (conocido por su papel en la película ''Sonrisas y lágrimas'' como Friedrich von Trapp) tuvo éxito, y se llegaron a realizar 2 secuelas... ¡ver para creer!
7. 3 SUPERHOMBRES
1967
En los años 60 en Italia y España, medios y dinero para hacer una película digna de superhéroes, no había, para que engañarnos!
Pero morro, lo que se dice morro, sobraba para dar, tomar y regalar. Y mucho morro es precisamente lo que tuvieron los creadores de estos 3 personajes.
Dos ladrones de joyas reclutados por un agente del FBI para formar un grupo especial, ''los 3 Supermen'' dedicados a luchar contra el crimen. Fueron los reyes de las camas elásticas, porque en el fondo estos 3 birriosos superhéroes tan sólo eran unos tipos fondones vestidos con ridículos pijamas y que pegaban unos saltos de vértigo.
La película es 100% infumable, pero por alguna misteriosa razón... ¡se realizaron hasta 12 secuelas! La última de ellas en 1985.
8. SUPERARGO EL ENMASCARADO
1967
Si los mexicanos tenían al Santo, el rey de los luchadores enmascarados... ¡el cine español no iba a ser menos! Por ello creamos nuestro superhéroe particular: Superargo el Enmascarado.
Un antiguo luchador que, tras apiolar a un compañero en el ring, es reclutado por el servicio secreto. Su enemigo es el mad doctor más patético de todos los tiempos, el Dr. Diabólikus (hay que tener narices para ponerse semejante nombrecito). Vestido con un traje rojo que realza sus ''lorzas'' y equipado con la tecnología más ''in'' del momento (¡inolvidable la aceituna capaz de detectar material radioactivo!), Superargo se interna en la guarida del Dr. Diabólikus, es atrapado, torturado, golpeado, quemado vivo, congelado... ¡pero sale indemne de todas las pruebas! y repartiendo tortazos a tutiplen logra salvar al mundo como manda la tradición del tebeo costroso.
¡Vivan los superhéroes ibéricos!
9. SUPERSONIC MAN
1979
El inefable Juan Piquer Simon, rey de los monstruos de goma, no podía dejar de sumarse a la moda de los superhéroes patéticos.
Justo un año después del Superman de Richard Donner, lanzó esta revisión hispana (aunque el juraba y perjuraba que la había filmado antes).
¡Todo en esta película patético! Empezando por el trajecito del superhéroe, y terminando por sus superpoderes, algunos tan bizarros como el de convertir ¡en plátanos! las armas de sus enemigos.
Sus efectos especiales son un choteo (la escena con Supersonic levantando un tractor de cartón no tiene precio) y el resultado roza sencillamente lo paranormal. Para rizar el rizo... ¡se atrevió a estrenarla en EE.UU.!
Si nunca han llegado a tomarnos en serio como potencia cinematográfica mundial, esta película pudo ser uno de esos motivos.
10. EL HOMBRE PUMA
1980
Un lamentable y penoso ejemplo de como los italianos intentaron explotar el éxito de Supermán, magistralmente interpretado por Christopher Reeve.
Resulta casi imposible imaginar algo más torpe que esta película, con un guión absolutamente petulante. Uno de los peores pastiches que se pueden crear, que mezcla aztecas, extraterrestres, y superhéroes ridículos.
Un chamán azteca es el custodio de la paz y seguridad de la máscara del Dios Puma. Cuando la máscara es robada y usada para el mal, el mago se dedica a buscar al descendiente de los Hombres Puma (los guardianes de la máscara), y para ello no tiene mejor idea que probar su identidad lanzándolos desde una ventana. Si vuelan (porque los pumas vuelan, ¿no?) es que son ellos.
Conclusión, para qué seguir, ¿no? Bueno, describiré el inenarrable vestuario del superhéroe: una capa que se hace ''poncho'', una remera de color, unos pantalones ''deportivos'' y unas botas vaqueras.