La Caixa ofrece a día de hoy 2.9 % fijo con las cuatro vinculaciones. Ese tipo de interés no es propiciador de ningún tipo de hecatombe ni de nada. El problema es el capital que has de financiar, o sea, el elevadísimo precio del piso, no la hipoteca. La generación de mi padre pagaba por encima del 7 por ciento y sin ningún problema porque el capital era bajo: por entre 2 y 8 millones tenías pisos a rabiar, y los sueldos estaban en torno a las 150 mil pesetas. Un juez ganaba básicamente lo mismo que ahora, medio millón de pesetas: podía comprarse un piso al año a tocateja. Obviamente esto fueron unos años dorados; después, ya sabemos todos lo que pasó.