Perdiste el tren del dinero regalado (tipos de interés ridículos) y proyectas deseando que la vivienda acabe siendo tapa de yogur.
Yo estuve x aquí en 2006 y entre pagar mortajadas indecentes por algo hinchado que no lo vale y que te lo regalen, existe un abismo se dinero.
Al final en el sentido común esta el equilibrio.