Como pu-ma de adopción, con suegra con apartamento en Cambrils y muchos años y muchos buenos recuerdos de las vacaciones en esta localidad, tengo claro que ni un pu-mi (fruta-cosa) de concejal, ni la pandilla de los payasos estrafalarios fascistas insustanciales de los nacionalistas catalanes, ni sus puñeteros lazos y sus pilinguis crucecitas, ni sus cabezicas huecas de buenos nancys patéticos, ni toda esa fruta cosa hedionda, gañana, casposa y cansina de parafernalia que con el orgullo del pueblerino analbeto exhiben henchidos de ridículo y rancio amor patrio, ME VAN A HACER NO SEGUIR pasando las vacaciones DONDE ME SALGA de las narices.