MrShadwx
Himbersor
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La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria da el visto bueno a su consumo del singular producto
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Sus propiedades nutritivas, junto con el bajo impacto ecológico y económico que supone su producción, han llevado a la industria alimentaria a posar su mirada en los insectos. De hecho, algunos ya se han incorporado a los lineales de los supermercados. Mientras el nicho de negocio aumenta tímidamente, la legislación se prepara para su desembarco. Se aproxima la siguiente comanda: ' Un culín y una ración de grillos, por favor'.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha dado el visto bueno al consumo de preparaciones de larvas de escarabajo. El organismo ha evaluado positivamente el producto tras analizar la seguridad del consumo de preparaciones congeladas y liofilizadas de este insecto, aunque admite que puede causar reacciones alérgicas.
El bicho puede presentarse entero, en forma de pasta o en polvo e integrarse como ingrediente a diversos productos alimenticios, como barritas de cereales, pasta, análogos de carne y productos de panadería, según informa la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
Para su llegada al mercado, solo falta que la Comisión Europea apruebe su comercialización, lo que lo convertirá en el cuarto insecto incluido en la lista de nuevos alimentos. El primero en entrar fue el gusano de la harina, que se incorporó en mayo de 2021.
En noviembre se sumó la langosta migratoria, disponible en forma de congelado, seco y en polvo, y en febrero de este mismo año el grillo doméstico, que llagará al mercado bien como aperitivo o ingrediente de productos proteicos, galletas, pasta o congelado.
Los insectos están incluidos en la definición comunitaria de «nuevo alimento», regulada desde 2018, por lo que cualquier operador que quiera comercializarlos con fines alimentarios en la Unión Europea debe presentar una solicitud.
Si forma parte de la dieta tradicional de un país durante al menos 25 años y posee un historial de uso alimentario seguro, el operador debe simplemente notificar su comercialización aportando la documentación necesaria. En caso contrario, tendrá que seguir el procedimiento de autorización de nuevo alimento.
www.elcomercio.es
Sus propiedades nutritivas, junto con el bajo impacto ecológico y económico que supone su producción, han llevado a la industria alimentaria a posar su mirada en los insectos. De hecho, algunos ya se han incorporado a los lineales de los supermercados. Mientras el nicho de negocio aumenta tímidamente, la legislación se prepara para su desembarco. Se aproxima la siguiente comanda: ' Un culín y una ración de grillos, por favor'.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha dado el visto bueno al consumo de preparaciones de larvas de escarabajo. El organismo ha evaluado positivamente el producto tras analizar la seguridad del consumo de preparaciones congeladas y liofilizadas de este insecto, aunque admite que puede causar reacciones alérgicas.
El bicho puede presentarse entero, en forma de pasta o en polvo e integrarse como ingrediente a diversos productos alimenticios, como barritas de cereales, pasta, análogos de carne y productos de panadería, según informa la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
Para su llegada al mercado, solo falta que la Comisión Europea apruebe su comercialización, lo que lo convertirá en el cuarto insecto incluido en la lista de nuevos alimentos. El primero en entrar fue el gusano de la harina, que se incorporó en mayo de 2021.
En noviembre se sumó la langosta migratoria, disponible en forma de congelado, seco y en polvo, y en febrero de este mismo año el grillo doméstico, que llagará al mercado bien como aperitivo o ingrediente de productos proteicos, galletas, pasta o congelado.
Los insectos están incluidos en la definición comunitaria de «nuevo alimento», regulada desde 2018, por lo que cualquier operador que quiera comercializarlos con fines alimentarios en la Unión Europea debe presentar una solicitud.
Si forma parte de la dieta tradicional de un país durante al menos 25 años y posee un historial de uso alimentario seguro, el operador debe simplemente notificar su comercialización aportando la documentación necesaria. En caso contrario, tendrá que seguir el procedimiento de autorización de nuevo alimento.
Larvas de escarabajo, el nuevo insecto que podrás comer en Europa | El Comercio: Diario de Asturias
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria da el visto bueno a su consumo del singular producto
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