Macabrón
Memento mori...
De chaval llegué a tener más de 200 logos de Ford, esos óvalos azules de plástico que ponían con pegamento en la parrilla y el pandero de los Taunus y otros modelos. Las carreras que me pegaba huyendo de los dueños...
Diversión Paco de finales de los 70 y principios de los 80
No era estropeado ni nada sacarla en buen estado de la fruta goma esa de color que la pegaba... recuerdo pillar abiertos portales caros, bajarnos sin que nos viera el portero al garaje, y empezar a pillar insignias a tope, cuando entraba alguien escondernos detrás de los coches, y salir bien cargados je, je... cuando caía la del Porsche, que era la más codiciada...
Alguna vez nos quedábamos a ver si veñía el dueño del Mercedes (un farmacéutico alopécico con la mujer) "leche fruta... me gusta la fruta... " reírnos desde la esquina, el tío nos vió... salimos echando humo je, je, je...
Te reías una jartá... (9000 pesetas vaía la fruta estrellita, año 1990)
Hoy los chavales ya no saben ni hacer trastadas
Anda que lo de robar los sellos de caucho del colegio, estamparlos por el pasillo, echar bombas fétidas en la capilla antes de la misa, cantar letras "calientes" ("alabaré alabaré me amaré me amaré me foooooollaré a Sabrinaaaaaa"), "purgar" los radiadores que se llenaba de agua negruzca con olor a gasoil el suelo, loctite en la puerta del puñetero colegio poco agradable aquel de Torrejón de la Calzada, de lo peor que he conocido...
Cuando nos castigaron en 6º EGB en 1988 a hacer un curso de verano en julio en el colegio de los puñeteros Corazonistas (ahora se llama San Valero, Zaragoza, frente al Seminario) y aunque aprobé CINCO en septiembre (olé Macabrón) la de destrozos que le hicimos... un colega hijo de cerrajero sabía abrir cerraduras, nos colábamos en las "tutorías", despachos, rompimos lavabos, cristales a pedradas.... ahora los chavales no tienen picardía ninguna. Cómo le dejamos el Citroen GS al cabrón del "Buitre..." a rayajos
Diversión Paco de finales de los 70 y principios de los 80
No era estropeado ni nada sacarla en buen estado de la fruta goma esa de color que la pegaba... recuerdo pillar abiertos portales caros, bajarnos sin que nos viera el portero al garaje, y empezar a pillar insignias a tope, cuando entraba alguien escondernos detrás de los coches, y salir bien cargados je, je... cuando caía la del Porsche, que era la más codiciada...
Alguna vez nos quedábamos a ver si veñía el dueño del Mercedes (un farmacéutico alopécico con la mujer) "leche fruta... me gusta la fruta... " reírnos desde la esquina, el tío nos vió... salimos echando humo je, je, je...
Te reías una jartá... (9000 pesetas vaía la fruta estrellita, año 1990)
Hoy los chavales ya no saben ni hacer trastadas
Anda que lo de robar los sellos de caucho del colegio, estamparlos por el pasillo, echar bombas fétidas en la capilla antes de la misa, cantar letras "calientes" ("alabaré alabaré me amaré me amaré me foooooollaré a Sabrinaaaaaa"), "purgar" los radiadores que se llenaba de agua negruzca con olor a gasoil el suelo, loctite en la puerta del puñetero colegio poco agradable aquel de Torrejón de la Calzada, de lo peor que he conocido...
Cuando nos castigaron en 6º EGB en 1988 a hacer un curso de verano en julio en el colegio de los puñeteros Corazonistas (ahora se llama San Valero, Zaragoza, frente al Seminario) y aunque aprobé CINCO en septiembre (olé Macabrón) la de destrozos que le hicimos... un colega hijo de cerrajero sabía abrir cerraduras, nos colábamos en las "tutorías", despachos, rompimos lavabos, cristales a pedradas.... ahora los chavales no tienen picardía ninguna. Cómo le dejamos el Citroen GS al cabrón del "Buitre..." a rayajos