La denuncia de un vecino expulsa a un grupo de mujeres que hacían zumba en un parque de Madrid

Ese parque es ENORME, ni de coña podian molestar a ningun vecino.
El denunciante es un tocacojones de manual.

Seguramente ha sido uno de los perroflautas con tambores que suelen pillar el sitio.
pues le molesta a la vista cuando pasa, a saber.
 
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Y nadie ha pensado en el hedor a ingle rancia de chonaca y a orina, huelga decir la vergüenza ajena que expelían en derredor con cada movimiento arrítmico, con cada grito preñado de euforia, con cada convulsión. Ya tienen demasiados privilegios, bravo por ese vecino. Hay que boicotear cada cosa que hacen y encontrar satisfacción en ello, porque las charos son nuestro peor enemigo.
 
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