La inteligencia artificial ha revelado la imagen más clara hasta ahora de la Sábana Santa de Turín, mostrando cómo podría haber lucido lo que algunos sostienen es la figura del propio Jesús, que habría quedado plasmada en el tejido tras la resurrección.
Esta semana se conmemoró el 90 aniversario de la primera vez que la reliquia se exhibió en 400 años, atrayendo a multitudes de más de 25.000 personas a la Catedral de San Juan Bautista en Turín.
Para conmemorar dicho evento histórico, el tabloide británico Daily Star decidió darle un giro moderno al sudario. Con la ayuda de Midjourney, una inteligencia artificial generativa de imágenes, crearon un rostro realista a partir de una foto mejorada del rostro que se distingue en la tela de lino original de 4.2 metros de longitud.
El resultado es un hombre con cabello largo y barba, con los ojos abiertos y saltones. También se puede ver parte de su cuerpo.
Crédito: Daily Star.
Aquellos que se presentaron en la catedral en 1933 estaban convencidos de que la sangre de Jesucristo estaba en la tela, aunque hasta el día de hoy persiste mucho escepticismo. Se reveló por primera vez a las masas hace unos 600 años y, aun en aquel entonces, algunos pensaban que la Sábana Santa era más probablemente un fraude que las verdaderas huellas de Jesús.
Se ha realizado trabajo, por supuesto, para intentar llegar al fondo de la autenticidad de la de la reliquia. Unas pruebas de de datación por carbono realizadas en 1988 sugirieron, por ejemplo, que podría haber sido creada entre los años 1260 y 1390 d.C. —algo que llevó a muchos a especular que el propio Leonardo Da Vinci pudo ser el autor—.
CARBONO-14: El moho y las bacterias, la colonización de las fibras textiles y la suciedad o los minerales que contienen carbono, como la piedra caliza, adheridos a ellas, en los espacios vacíos entre las fibras —que a nivel microscópico representan alrededor del 50 % del volumen—, pueden ser difíciles de eliminar por completo en la fase de limpieza de la muestra, lo que puede distorsionar la datación.
Más recientemente, en 2019, un equipo de investigadores de Francia e Italia obtuvo acceso a los datos sobre la datación que aseguró que era una falsificación medieval, revelando evidencia que sugiere que hubo conclusiones erróneas en dichos análisis.
Por MysteryPlanet.com.ar.
Esta semana se conmemoró el 90 aniversario de la primera vez que la reliquia se exhibió en 400 años, atrayendo a multitudes de más de 25.000 personas a la Catedral de San Juan Bautista en Turín.
Para conmemorar dicho evento histórico, el tabloide británico Daily Star decidió darle un giro moderno al sudario. Con la ayuda de Midjourney, una inteligencia artificial generativa de imágenes, crearon un rostro realista a partir de una foto mejorada del rostro que se distingue en la tela de lino original de 4.2 metros de longitud.
El resultado es un hombre con cabello largo y barba, con los ojos abiertos y saltones. También se puede ver parte de su cuerpo.
Crédito: Daily Star.
Aquellos que se presentaron en la catedral en 1933 estaban convencidos de que la sangre de Jesucristo estaba en la tela, aunque hasta el día de hoy persiste mucho escepticismo. Se reveló por primera vez a las masas hace unos 600 años y, aun en aquel entonces, algunos pensaban que la Sábana Santa era más probablemente un fraude que las verdaderas huellas de Jesús.
Se ha realizado trabajo, por supuesto, para intentar llegar al fondo de la autenticidad de la de la reliquia. Unas pruebas de de datación por carbono realizadas en 1988 sugirieron, por ejemplo, que podría haber sido creada entre los años 1260 y 1390 d.C. —algo que llevó a muchos a especular que el propio Leonardo Da Vinci pudo ser el autor—.
CARBONO-14: El moho y las bacterias, la colonización de las fibras textiles y la suciedad o los minerales que contienen carbono, como la piedra caliza, adheridos a ellas, en los espacios vacíos entre las fibras —que a nivel microscópico representan alrededor del 50 % del volumen—, pueden ser difíciles de eliminar por completo en la fase de limpieza de la muestra, lo que puede distorsionar la datación.
Más recientemente, en 2019, un equipo de investigadores de Francia e Italia obtuvo acceso a los datos sobre la datación que aseguró que era una falsificación medieval, revelando evidencia que sugiere que hubo conclusiones erróneas en dichos análisis.
Por MysteryPlanet.com.ar.