cortoplacista
misántropo
A los que hemos padecido la epidemia de fútbol, futboleros haciéndonos partícipes forzosos de sus incontenidas emociones, elevando a la categoría de mitos a tíos cuya máxima virtud consiste en correr detrás de un balón, un deporte marrullero puesto como ejemplo de comportamiento, etc, etc, etc y mil millones de millones de etcéteras más no nos alegra la noticia de que el fútbol pase apuros, es que nos la pone dura...pero es que si palma el fútbol brindo, por mis huevones que brindo (y llevo años sin beber ni gota).