Humor amarillo: Los CDR rodean la casa de los joyeros Tous de ositos con lazos amarillos

невежда dijo:

A los Tous me parece que les gustan los lazos amarillos rodeando su casa.

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_vOx_ dijo:

Les guste o no les guste no deja de ser un acto reprobable de acoso, les están obligando a significarse aunque no quieran o les sea perjudicial. Es el mismo caso por el que la gente que sale a quitar lacitos sale de noche y encapuchada, para no significarse. Y también el porque mucha gente durante mucho tiempo ha preferido callarse o siguen callándose para no discutir con familiares y amigos o por tener problemas en su pueblo. Esto es lo mismo por lo que recuerdo en mi infancia esto de que "de política ni de religión ni de fútbol" se debía hablar. Recuerdo que mi padre se negaba a comentar su voto o sus preferencias políticas, con lo de "el voto es secreto". De hecho por eso se ponen cabinas en los colegios electorales, para dar seguridad al votante de que nadie le impone un voto por "quedar bien" o por miedo de "no encajar" o tener problemas más grandes. Y podría decir que este miedo a hablar, a significarse políticamente era entonces herencia del franquismo. Eso de no hablar de política en público, ni en casa, que los niños hablan. Por eso esta presión social de los llacis es lo mismo que el fascismo, no tan solo una sociedad totalitaria, sino una sociedad en la que se debe tener miedo a discrepar y demostrarlo, en la que encima los poderes públicos, la administración, los ayuntamientos, generalitat está en sus manos.

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_vOx_ dijo:

Les guste o no les guste no deja de ser un acto reprobable de acoso, les están obligando a significarse aunque no quieran o les sea perjudicial. Es el mismo caso por el que la gente que sale a quitar lacitos sale de noche y encapuchada, para no significarse. Y también el porque mucha gente durante mucho tiempo ha preferido callarse o siguen callándose para no discutir con familiares y amigos o por tener problemas en su pueblo. Esto es lo mismo por lo que recuerdo en mi infancia esto de que "de política ni de religión ni de fútbol" se debía hablar. Recuerdo que mi padre se negaba a comentar su voto o sus preferencias políticas, con lo de "el voto es secreto". De hecho por eso se ponen cabinas en los colegios electorales, para dar seguridad al votante de que nadie le impone un voto por "quedar bien" o por miedo de "no encajar" o tener problemas más grandes. Y podría decir que este miedo a hablar, a significarse políticamente era entonces herencia del franquismo. Eso de no hablar de política en público, ni en casa, que los niños hablan. Por eso esta presión social de los llacis es lo mismo que el fascismo, no tan solo una sociedad totalitaria, sino una sociedad en la que se debe tener miedo a discrepar y demostrarlo, en la que encima los poderes públicos, la administración, los ayuntamientos, generalitat está en sus manos.

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