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Nadapasista
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Estaba escuchando una emisora de radio local de buena mañana. La típica de que unos conocen a otros y se mandan mensajes, cuentan sus movidas y se felicitan o dedican canciones. La verdad es que la puse por tener algo de fondo en ese momento. Hasta aquí nada extraño.
Pero hete aquí que entra un fulano a contar una anécdota intranscendente y la cosa es que el presentador conocía a la progenitora del fulano que por lo visto estaba hospitalizada. El tipo se interesa por el estado de la señora y el hijo explica que su progenitora no estaba protestando por una dolencia y al final se demostró que era un infarto.
Y el hijo, con total desparpajo y sin darle importancia dice entre risas "ya sabes, eso que según los médicos está tanto de moda, los infartos y los ictus JA JA JA"
En ese momento todo mi ser quedó petrificado. La normalización acrítica de una patología "que está de moda" y que le ha pasado a tu propia progenitora.
Como si estuvieras contando un chiste o un chascarrillo más. Una información secundaria envuelta en una conversación intrascendente.
El VERDADERO HORROR es el que se esconde en estos detalles cotidianos.
Pero hete aquí que entra un fulano a contar una anécdota intranscendente y la cosa es que el presentador conocía a la progenitora del fulano que por lo visto estaba hospitalizada. El tipo se interesa por el estado de la señora y el hijo explica que su progenitora no estaba protestando por una dolencia y al final se demostró que era un infarto.
Y el hijo, con total desparpajo y sin darle importancia dice entre risas "ya sabes, eso que según los médicos está tanto de moda, los infartos y los ictus JA JA JA"
En ese momento todo mi ser quedó petrificado. La normalización acrítica de una patología "que está de moda" y que le ha pasado a tu propia progenitora.
Como si estuvieras contando un chiste o un chascarrillo más. Una información secundaria envuelta en una conversación intrascendente.
El VERDADERO HORROR es el que se esconde en estos detalles cotidianos.
