Ya me diréis que ilusión genera seguir a un equipo plagado de neցros. Es que es lo mismo que ir con Los Ángeles Lakers o con Costa de Marfil en la Copa de África.
Cero identificación. Ya hace tiempo que se alcanzó el punto de no retorno, pero este año ya será insoportable: cambiar a Nacho, Kroos y Joselu, por Yoro, Mbappé y Endrick.
Quedarán Carvajal, Courtois, Valverde, Brahim (con el ridículo de su nacionalización), y los residuales Modric (en el descuento del descuento), Lucas Vázquez (ídem), Fran García (al que echarán en cuanto puedan por otro neցro), Ceballos (a 5 minutos en casa mercado de marcharse) y Lunin (desojando la margarita).
Y no me vengáis con el falso dilema de que Rudiger o Vinicius "sienten más la camiseta" que Casillas o Raúl. Que los segundos sean unos pataconeros traicioneros, no me hacen identificarme más con un afromusulmán o un defensor del BLM a tiempo completo y jugador de fútbol los fines de semana.
Hasta las selecciones de países o el mismísimo Athletic Club de Bilbao, han perdido su razón de ser.
Hoy lo veremos: si gana esa selección llamada España es por Lamine Yamal (como antes fueron Bojan, Munir, Ansu Fati) y Nico Williams.
Si pierde: pierde España.
Por no hablar del doble rasero al que nos acostumbra esta prensa que debemos soportar.
El Barcelona desangra fichando a los pocos jugadores que destacan en equipos de La Liga. Con dinero que no tiene, para más regocijo.
Desarma a
Valencia: Mathieu, Paco Alcácer, André Gomes.
Athletic: Valverde, Íñigo Martínez y ahora Nico Williams.
Sevilla: Keita, Adriano, Alves, Lenglet.
Al Deportivo le fichó a Rivaldo a horas de cerrarse el mercado.
Al Leganés lo mandó directamente a segundo por fichar en un mercado de invierno a Braithwaite.
Toca a Zubimendi, a Gayá, a Baena, a Guido del Betis, pero el equipo al que todos odian es al Real Madrid.
En resumen: ser del Real Madrid se han convertido es ser de los Patriots, de los Golden State, de Amazon, de Beyoncé, o de quién shishi asegure ganar más que el otro.
Se lo han cargado, pero nos la han metido hasta el tuétano sibilinamente, porque SE LO HAN CARGADO GANANDO, así a algunos les DOLERÁ MENOS.
La excusa esgrimida es que el Real Madrid es UNIVERSAL, como se creó unas palabras para que los estados naciones aceptaran tragar con su extinción: TOLERANCIA, MULTICULTURAL, DEMOCRACIA y PROGRESO.
Con esa UNIVERSALIDAD se tapa todo objeto de crítica.
Construirán una réplica del Bernabéu en Riad, Miami o Astana, y jugaremos, pues ya no somos de ningún lugar.
Que gane el Real Madrid es como que gane Francia para un francés (ojo no he dicho "francés). No significa ya NADA.