No quiero enrollarme demasiado ni robaros más tiempo del necesario. (Edito: al final se me ha ido un poco la mano xD lo siento pero no hay resumen que valga)
Uso esta cuenta fake, clon o como la queráis llamar, con la intención de conservar mi anonimato. Confío en que lo comprenderéis.
Todo lo que voy a contar es real, no pretendo generar un personaje para provocar reacciones y regodearme como he visto hacer a muchos trolls de por aquí.
Tampoco es una historia excepcional, en los tiempos que corren diría que es hasta común. Si la comparto con vosotros, cientos de potenciales lectores ya curtidos en estos lares, es porque realmente necesito desesperadamente consejos o ideas que no se me hayan ocurrido a mí o a mi entorno y me sirvan para superar este estado anímico y mental que está a punto de hacerme colapsar.
Confío en la sabiduría colectiva de burbuja, me la pela enormemente que alguien pueda pensar que estoy haciendo el canelo pidiendo ayuda a gente desconocida que pulula por internete, en la vida real tampoco he encontrado las respuestas que buscaba, tal vez porque estoy haciendo las preguntas equivocadas, no lo sé, por eso supongo que escribo esto.
En primer lugar quiero entonar el mea culpa por como ha tras*currido mi vida, no culpo a la crisis económica de mi situación laboral, ni repruebo a las mujeres por amar menos que espinete. Lo cierto es que he cometido cagada tras cagada y he tenido una actitud pésima e inmadura durante demasiado tiempo.
Para que os hagáis una idea de mi perfil. Tengo 30 años, soy el mayor de tres hermanos. Mi familia es de origen humilde pero nunca nos ha faltado de nada, como se suele decir. Mis hermanos tienen la vida encaminada, novi@s de años y tengo constancia de que ambos son felices, ella es superdotada, una crack en lo suyo y mi otro hermano acabó una ingeniería y también ha conseguido un curro con bastante caché. Yo en cambio tengo una FP mierdosa, después de sacármela accedí a la universidad y finalmente abandoné la carrera por desmotivación. Siempre he tenido facilidad para el estudio pero nunca he encontrado dentro de mí la pasión necesaria que me permitiera mantener un mínimo de constancia, pecados producto de mi inmadurez. Vamos, que he sido un puñetero vago la mayor parte de mi vida. Tras dejar la universidad tuve una depresión no tratada que se prolongó al menos año y medio.
A mis 30 años tengo unos pocos cotizados en distintos trabajos no cualificados, siempre ligando contratos temporales de máximo 6 meses con todo lo que ello conlleva de cara a planificar mi vida a medio y largo plazo. En mi curro actual gano limpios algo más de 1600 al mes (un sueldo decente en mi zona) y tengo un horario que muchos firmarían. Estuve varios años viviendo de alquiler en pisos compartidos hasta que volví a casa de mis padres donde resido actualmente. Soy bastante ahorrador y tengo mucho autocontrol sobre el dinero pero con la cantidad ahorrada hasta ahora no puedo proponerme prácticamente nada.
Voy a tratar de escribir un poco más desde el "corazón". Donde peor lo llevo es en el aspecto sentimental, con mucha diferencia. Nunca he tenido novia, todas las relaciones que he tenido con mujeres han sido con cortesanas y aunque soy consciente de que en este foro hay mucho entusiasta de estos servicios os aseguro que yo nunca he terminado satisfecho, más bien me acababa sintiendo como una cosa, por eso casi siempre que me iba de pilinguis acudía borracho o medio drojado. De hecho hace ya casi tres años que no voy y sinceramente tampoco tengo ganas de volver, siendo un cliente consumado como lo he sido, llamadme afeminado o lo que queráis pero no es eso lo que necesito, ya no me sirve ni como alivio puntual.
Durante buena parte de mi juventud he pasado olímpicamente de las tías (y ellas de mí, claro), craso error que ahora estoy pagando muy caro. Mi interacción con mujeres se limitaba a algunas, contadas, relaciones de amistad. Ni tonteaba, ni trataba de ligar, yo era invisible para ellas y ellas para mí. Aquellos años me dedicaba a salir con los amiguetes, viciar, algún que otro hobby y teóricamente a estudiar. Las tías estaban fuera de la ecuación. Cuando quise cambiar esto la inexperiencia que arrastraba me lastró muchísimo, como era de esperar. Físicamente no soy un craco, ni guapo tampoco, soy del montón, para algunas puedo llegar a resultar atractivo y para la inmensa mayoría poca cosa. En lo personal siempre fui un chaval hermético y algo asocial (a pesar de que nunca me faltaron buenos amigos y en general caigo bien), esto lo empecé a corregir hace unos cuantos años. En los últimos 2-3 mi actitud ha mejorado notablemente y han surgido algunas oportunidades que por un motivo o por otro YO me he acabado cargando. La que más me dolió fue con una chica con la que empecé a quedar, me friendzoneo brutalmente después de que yo me quedara pilladísimo de ella. Desde la adolescencia que no sentía nada por una tía y cuando por fin me ocurre, tras años vagando por el desierto, e identifico algunas señales (o eso quería creer) en lugar de atacar la traté como a una amiga más porque en realidad era lo único que sabía hacer (penoso pero tristemente cierto), cuando me quise lanzar ya era demasiado tarde. Creo que la chavala me tanteó un tiempo y luego perdió el interés, juraría que el motivo no fue el físico si no mi actitud o que ella misma se sintiera rechazada por mí en algunos de esos momentos que yo dejé morir cuando nos conocimos. Tiempo después esta misma chica aconsejándome, sin que yo se lo pidiera, sobre un potencial ligue mío en ciernes me dijo con tonito de reproche que tuviera más iniciativa y ese tipo de cosas. Sea como fuere aprendí parcialmente la lección, he conseguido ser más directo y asumir con cierta pericia el menso pero necesario juego del tonteo que al menos me ha servido para enrollarme con varias tías, eso sí, bajando el listón (no hablo de físico) sabiendo de antemano que no iba a salir nada serio de ahí.
El mero hecho de destacar esta experiencia que para muchos sería intrascendente, siendo generosos, refleja el erial en el que se ha convertido mi vida sentimental. solterón de libro.
También he convivido durante mucho tiempo con el lastre de la droja. He consumido drojas casi toda mi vida adulta, al principio las usaba, junto con el alcohol, como lubricante social, después acabaron siendo un compañero de viaje inseparable. En muchas etapas de mi vida he sido incapaz de disfrutar de una noche de fiesta sin ponerme hasta el ojo ciego de todo. Aunque el consumo a lo largo de mi vida no haya sido lineal o constante, llegando a estar 2 o 3 años sin meterme nada, he alternado con otras épocas donde abusaba bastante por encima de lo que se consideraría un uso "esporádico". No puedo decir ahora mismo que las he dejado por completo pero en los dos últimos años casi he conseguido erradicar las drojas de mi vida, salvo quizás la más dura, el alcohol. Y si sigo recurriendo al alcohol también es en parte porque sigo moviéndome en ambientes propicios para ello, ambientes que a veces me sobran pero que en muchas ocasiones es lo único que te encuentras.
Y bien, dicho esto...
Estoy totalmente abatido, desganado y desesperanzado. Soy Bill Murray en Atrapado en el Tiempo, mi vida se ha convertido en un bucle dantesco que me encoge el alma. No tengo ningún motivo, ninguna ilusión, que me permita afrontar el día a día sin que se me venga el mundo encima. Mañana de nuevo a remar, cómo palos me mentalizo si no tengo nada importante por lo que luchar. Si tuviera la oportunidad de formar mi propia familia con total seguridad que haría lo que hiciera falta para sacarla adelante, es más, sería feliz sacrificándome para lograrlo. La ausencia de ese pilar fundamental tras*forma en un sinsentido casi todo lo demás, no será así para todo el mundo, para mí sí lo es, ni toda la propaganda hedonista y materialista al servicio de un sistema consumista ha podido arrebatarme ese instinto. El caso es que tengo esa carencia y puede que sea así el resto de mi vida. Ha llegado un punto en que ya no disfruto ni de mis hobbies, tiro mi tiempo libre a la sarama, cada vez me apetece menos salir, relacionarme. He intentado marcarme objetivos realistas, organizarme una rutina para tratar de mantener la cabeza ocupada y nada, estoy en un estado de anhedonia como nunca antes. Llevo así de estropeado varios meses, cada dos por tres me rondan pensamientos que ya os podéis imaginar la temática. Siempre he sido una persona más bien negativa o pesimista pero jamás había sentido este vacío, sencillamente me siento muerto en vida.
Alguna persona de mi entorno más cercano me ha recomendado que acuda al psiquiatra. Realmente pensáis que con todo lo que os he contado se trata de una cuestión de desequilibrio químico en mi cerebro ¿?
A veces pienso que puedo estar exagerando sin darme cuenta, ya sabéis, problemas del primer mundo. Pero jorobar, el sufrimiento es tan intenso, tan real... ahora mismo me domina, es superior a mí. Sé que haría mucho daño a mi familia si escuchara esto pero preferiría no haber nacido.
