Taliván Hortográfico
ПРЕД P И B ВИНАГИ СЕ ИЗПИСВА M
Con todo y con eso, lo del título de la III Roma, me sigue pareciendo una parodia, si en algo se parece Moscovia a Roma en todo caso es a lo peor de la Roma decadente y orientalizarte; y ese es un título que yo no querría tener.
Los ideales son necesarios y yo también participo del ideal, y del sueño, de una Roma "eterna". Bajándonos a los hechos, la Constantinopla de 1450 seguramente era una birria que tenía muy poco de Roma pero la prefiero mil veces a la Estambul de 1600 o a El Cairo de cualquier época. Y de Moscú puedo decir lo mismo. También la prefiero.
No olvidemos que hay otros complejos culturales y políticos que también se han querido arrogar el manto de herederos de Roma, como los otomanos y ya antes de eso los califas omeyas. El peligro de una apropiación so pretexto de integración de lo europeo por parte del Islam no es sólo cosa del pasado sino una amenaza futura real y si no échale una mirada a los amigos de Macron y al alcalde de Londres. Una amenaza lo bastante real como para que yo vea con desconfianza una visión excesivamente integrista (y por ende, divisiva) de lo que es tradicionalmente europeo y lo que no.
Como me he mantenido completamente al margen del ambiente profundamente divisivo y progresivamente cada día más tóxico del subforo IIIGM no me siento particularmente anti-ruso y aconsejo a la gente inteligente que no se dejen llevar demasiado de esa dicotomía que se respira en el ambiente de ver lo ruso como negación absoluta de lo europeo y no como una variedad periférica.
Entre otras cosas porque me recuerda mucho al leyendanegrismo antiespañol, que está tan profundamente arraigado de siglos en ingleses, alemanes, franceses, que en muchos casos reaccionan acorde a él porque forma parte íntima de su forma de ver el mundo, sin saber que están adoctrinados pese a que el enemigo contra el que se les adoctrinó durante siglos hace 200 años que ya no existe.
El american way of life es tan antieuropeo o tan anti romano como todo lo ruso. Los dos son casos extremos que no son denegadores de su esencia pero sí potencialmente tóxicos.