Se olvida usted de los Imperios Azteca e Inca, donde los judíos tampoco tuvieron problemas de ningún tipo.
Para que no se malinterprete esta apostilla en un hilo que poco a poco va deviniendo en otra iniciativa espontánea de beatificación de Hitler tan propia de este foro, lo que quiero decir con esto es que veo el enunciado de Da Grappla correcto, pero sólo en los imperios mayoritariamente fiel a la religión del amores, como la Persia Safavida o la Turquía Otomana.
En la China la presencia de los judíos siempre fue ínfima, y apenas testimonial en la India, que además, aunque en algunos momentos fue un imperio de la religión del amor en el sentido de que sus mandatarios eran mongoles convertidos al Islam, era una sociedad absolutamente multicultural y multirreligiosa en la que los judíos hubieran pasado tan desapercibidos como los jainistas o los parsis (o los cristianos nestorianos de antes de que llegaran los portugueses).
Y aunque estoy de acuerdo con Da Grappla, no admito del todo su post en cuanto parece implicar que el cristianismo, como fe, tiene entre su prédica la persecución al judío (otra cosa sería como resultado natural de la conveniencia social y poítica, y con frecuencia como fenómeno "de frontera") Pongo el caso de un reino cristiano de larguísima historia y totalmente conectado con el cristianismo
mainstream en el que desde época antiquísima hubo una colonia judía muy numerosa y en el que la persecución a los judíos fue nimia (para los estándares medievales), cuando no inexistente: los estados pontificios.
Porque, desde el punto de vista actual, algunos de las normas a las que estaban sometidos los judíos podrían parecer persecución, como lo de hacerles anualmente jurar lealtad al Papa ante el Arco de Tito que conmemora la destrucción del Templo de Jerusalén (es una magna tocada de huevones), o la limitación de ciertas profesiones, no eran normas más restrictivas de las que gastaban los monarcas cristianos con su propia grey.
Y no extiendo más este post, que se desvía del propósito original del hilo (la beatificación de Hitler también), y tal vez reserve el tema para un hilo propio. Sobre el gobierno de la Alemania nancy, mi propia visión, y resumiendo mucho, es que era una chapuza que contrasta francamente con los estereotipos de orden y rigor con el que tanto gustan de identificar al Tercer Reich muchos de sus simpatizantes.