Pero el problema de Tailandia es que no se persigue como se debe.
Que sí, que mandan a pena de fin a cualquier pobre diablo al que le pillen un gramo, muy bien. Pero después, ¿cómo explicas que sitios turísticos de playa como Kho Phangan celebren fiestas de desfase máximo como la Full Moon Party donde se juntan cada año 50.000 jovencitos occidentales a drojarse hasta las trancas, a sabiendas de las autoridades?
Si como país quieres perseguir la droja, pues lo haces de verdad como Singapur, donde no se permite NADA de droja, ni fomentas turismo de vicio y droja. A diferencia del paripé hipócrita tailandés