el mensa
Monje guerrero del lonchafinismo
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Esto parece un fake o una noticia del mundo today o algo parecido, versión distopía lisérgica.
De todas formas hay que reconocer los méritos de ellas:
1) Eligen un enemigo sumiso y asequible. De 1° de "El arte de la guerra".
2) Factor sorpresa. Los engañan y emboscan. También recogido en "El arte de la guerra".
3) Impunidad. Conocen que son intocables y que tienen a gran parte de la sociedad de su parte. Por eso montan el numerito sin miedo. De nuevo un mix entre "El arte de la guerra" y distopía totalitaria.
Dicho esto, si tan siquiera 10 o 20 hombres (lo de hombres es un decir visto lo visto) no se rebelan y se defienden verbalmente primero y físicamente después es que ni son hombres ni nada.
Con una proporción de 1/5 o 2/5 se ponen contra la pared con la espalda cubierta a repartir palos y "ganan la batalla" de calle. Incluso, si solo quieren utilizar violencia para defenderse, se puede hacer una retirada o huida bastante honorable dentro de la gravedad de la humillación gratuita que están sufriendo.
Claro que para eso hay que tener algo de orgullo y planificación, grabarlo todo por si acaso y echarle bemoles.
Pena me da: La falta de organización que tenemos el bando masculinista opositores a esto. La mayoría somos duros trabajadores del sector privado entrenados en planificación y desarrollo de planes empresariales mas o menos complejos. Ante un enfrentamiento real aunque inicialmente lo tendríamos todo en contra (financiación, medios, etc.) nos podríamos rebelar, presentar una resistencia inicial fuerte y con mejores medios y/o más apoyos organizar un posterior contrataque.
Si quieren guerra les tendríamos que complacer y recoger el guante. Aunque nuestros verdaderos enemigos ya han ganado con nuestra división interna, las revoluciones femimarxistas se han de combatir mal que nos pese que sea un desvío de recursos.
De todas formas hay que reconocer los méritos de ellas:
1) Eligen un enemigo sumiso y asequible. De 1° de "El arte de la guerra".
2) Factor sorpresa. Los engañan y emboscan. También recogido en "El arte de la guerra".
3) Impunidad. Conocen que son intocables y que tienen a gran parte de la sociedad de su parte. Por eso montan el numerito sin miedo. De nuevo un mix entre "El arte de la guerra" y distopía totalitaria.
Dicho esto, si tan siquiera 10 o 20 hombres (lo de hombres es un decir visto lo visto) no se rebelan y se defienden verbalmente primero y físicamente después es que ni son hombres ni nada.
Con una proporción de 1/5 o 2/5 se ponen contra la pared con la espalda cubierta a repartir palos y "ganan la batalla" de calle. Incluso, si solo quieren utilizar violencia para defenderse, se puede hacer una retirada o huida bastante honorable dentro de la gravedad de la humillación gratuita que están sufriendo.
Claro que para eso hay que tener algo de orgullo y planificación, grabarlo todo por si acaso y echarle bemoles.
Pena me da: La falta de organización que tenemos el bando masculinista opositores a esto. La mayoría somos duros trabajadores del sector privado entrenados en planificación y desarrollo de planes empresariales mas o menos complejos. Ante un enfrentamiento real aunque inicialmente lo tendríamos todo en contra (financiación, medios, etc.) nos podríamos rebelar, presentar una resistencia inicial fuerte y con mejores medios y/o más apoyos organizar un posterior contrataque.
Si quieren guerra les tendríamos que complacer y recoger el guante. Aunque nuestros verdaderos enemigos ya han ganado con nuestra división interna, las revoluciones femimarxistas se han de combatir mal que nos pese que sea un desvío de recursos.
