Europa infierno fiscal. Buscando soluciones. Lunaticoin


10 países sin impuestos en criptomonedas
Las criptomonedas son activos digitales que emplean un cifrado criptográfico para garantizar su titularidad y asegurar la integridad de las tras*acciones. Está establecido como un medio digital de intercambio cumpliendo la función de una moneda digital. Son descentralizadas, lo que significa que no están controladas por ningún gobierno o entidad financiera.

Sin embargo, a medida que la tecnología blockchain avanza, con ella aparecen nuevas herramientas que se están instaurando poco a poco en algunos sectores de nuestra sociedad. Debido a los altos beneficios que podemos obtener de la inversión de criptomonedas, muchos países han impuesto una serie de pagos para aquellos inversores que han apostado por este mercado.

Otros países son más amigables con estos criptoactivos, y no tienen impuestos sobre la inversión en criptomonedas. Hemos hecho una lista de 10 países donde no tienes que pagar impuestos por criptomonedas:

  • Suiza
Suiza es uno de los paraísos cripto de Europa. La Administración Federal de Impuestos de Suiza considera las tras*acciones con criptomonedas lo mismo que las tras*acciones con monedas fiduciarias tradicionales, por lo que las exime de la declaración de impuestos.

Sin embargo, esta regulación está limitada a las tras*acciones con criptomonedas. Las ganancias de las criptomonedas y el trading profesionales sí están sujetos a impuestos sobre la renta y sobre el patrimonio anual en Suiza. Lo mismo ocurre con la minoría de criptomonedas, pues se considera un trabajo por cuenta propia.

  • Singapur
No existe un impuesto sobre las ganancias de capital en Singapur, por lo que cualquier persona física o jurídica que posea criptomonedas no tiene que pagar este impuesto. Este país es uno de los más ricos en economía, y destaca por ser el centro de tecnología financiera del sudeste asiático.

Las empresas que operan con trading de criptomonedas o aceptan pagos con criptoactivos sí están sujetas a un impuesto sobre la renta. La Autoridad Monetaria de Singapur, el ente financiero del país, ha dejado claro que ante todo, quiere desarrollar un entorno seguro para las criptomonedas.

  • Mónaco
Este es uno de los destinos preferidos de los grandes propietarios de criptomonedas. Su banca es bastante criptofriendly a la hora de monetizar, pues permite la venta de criptomonedas como Bitcoin sin la obligación de declarar impuestos.

  • Andorra
Andorra sí que establece una tributación del 10% para las ganancias de la venta de criptomonedas, pero es un destino muy favorable respecto al resto de países de Europa.

El país está desarrollando la Ley de Criptodivisas, que se presenta como una norma que va a permitir grandes exenciones a aquellos traders de criptomonedas que quieren reinvertir sus ganancias en activos del país.

  • Gibraltar
Gibraltar es el casi paraíso fiscal de Europa. Su jurisdicción se considera de baja tributación, y una de las razones es que no declara impuestos sobre las ganancias de capital de las inversiones en criptomonedas.

Sin embargo, esto lo podemos aplicar tan sólo a las personas, pues las empresas sí que tienen una tasa fija del 10% que se aplica al trading de criptomonedas.

  • El Salvador
Ha sido el primer país del mundo en calificar Bitcoin como moneda de curso legal. El objetivo de este país es atraer inversores extranjeros, y las exenciones de impuestos las aplica a ellos. Exime el impuesto sobre las ganancias de capital o sobre la renta a todo extranjero que quiera invertir en criptomonedas en el país.

Esto son declaraciones oficiales que El Salvador aún tiene que cumplir, pero que se esperan con ansias.

  • Alemania
Alemania es un país muy amigable con las criptomonedas. Impulsa a los inversores individuales y les exime de pagar el impuesto de las ganancias de capital si mantienen la inversión más de un año y por un valor máximo de 600€.

Las que no se eximen de pagar estos impuestos son las empresas, pues están sometidos a impuestos sobre la renta por las ganancias con criptomonedas, pues lo consideran como cualquier otro activo.

  • Malta
Malta es la isla blockchain. Los inversores y empresas no están obligados a declarar un impuesto sobre las ganancias de capital o sobre la renta. Sin embargo, sí deben declarar las operaciones de trading o exchanges, que reciben un 35% en impuestos sobre la renta.

  • Portugal
Portugal no grava el trading de criptomonedas ni las tras*acciones con estos activos. Exime estas operaciones del impuesto sobre la renta y de las ganancias de capital.

  • Bielorrusia
Aquí ya lo dicen hasta los propios políticos, que quieren convertir el país en una economía digital basada en cripto. En 2017 se firmó una ley que legalizaba las criptomonedas. Esta norma exime a las empresas y personas de los impuestos sobre las criptomonedas hasta 2023, momento en que tendrá lugar la revisión de la ley.

Actividades como la minería o el trading son consideradas inversiones privadas que no deben estar sujetas a impuestos. Si fuera tú aprovecharía ya mismo para coger un avión a Bielorrusia, que el tiempo vuela.

Las criptomonedas son cada vez más un tema de conversación en todo el mundo, y sus amplias posibilidades de recompensas son las que han hecho que muchos países establezcan leyes reguladoras. Esperamos que con esta lista de países criptofriendly hayamos resuelto alguna de tus dudas, y no dudes en contactarnos si aún tienes más.
 

Este artículo es antiguo. Malasia va a dejar de ser un sistema fiscal territorial en 2026, y Singapur y San Marino desde este año ya gravan los ingresos del extranjero.

Como nota positiva El Salvador ha hecho el camino inverso y ahora tiene un sistema territorial:


Tailandia tiene un cuasi sistema territorial: solo grava el dinero que entre en el país, así que si vives con una pequeña porción de lo que ingresas (y ahorras el resto) también es una opción bastante interesante.

Otros dos países interesantes que tienen un sistema fiscal territorial y no aparecen en el artículo son Filipinas y Guatemala.
 
 
Última edición:
Suiza pros y contras.



 
Última edición:
Volver